Crónicas
Quentin Tarantino dirigirá dos películas sucesivamente
28-IX-01
Tras casi cuatro años después del estreno de "Jackie Brown", Quentin Tarantino parece dispuesto al fin a volver a ponerse tras la cámara. El director, que fascinó al mundo con dos películas, "Reservoir dogs" y "Pulp Fiction" ("Jackie Brown" tuvo cierto éxito crítico, pero pasó desapercibida entre el público) y creó escuela inmediata entre los jóvenes realizadores de su generación, quiere acallar esos insistentes comentarios que hablan del "bluff Tarantino" para referirse a su declive y a su incapacidad para mantener el nivel de creatividad y originalidad que demostró, sobre todo, en sus dos primeros títulos y en guiones que dirigieron otros, como "Amor a quemarropa" ("True romance"), de Tony Scott, o "Abierto hasta el amanecer" ("From dusk till dawn"), de Robert Rodriguez. Tarantino se ha cansado de perder el tiempo interpretando penosos papeles en producciones como "Little Nicky" y tiene listos dos guiones que piensa rodar sucesivamente. "Todo irá a la perfección", declaró a Variety, "primero un film épico pequeño y después otro mucho mayor".
"Kill Bill" es el primero de los guiones que el director de "Reservoir dogs" convertirá en imágenes. Producido por Miramax, "Kill Bill" debería estar, a estas alturas, finalizando su filmación, pero el embarazo de la actriz Uma Thurman, para quien el guión fue especialmente escrito, ha retrasado el rodaje hasta la próxima primavera. Cuando se supo del embarazo de Thurman, Tarantino se planteó encontrar una sustituta, pero Miramax se negó en redondo. Finalmente, tanto el estudio como el director han decidido esperar a que la protagonista de "Pulp Fiction" esté lista para rodar (previamente, tendrá que entrenarse en diversas técnicas de defensa personal). "Me pregunté qué haría el director Joseph Von Sternberg en una situación como ésta", comentó Tarantino, "y me respondí que él siempre esperó a que Marlene Dietrich estuviera lista y la historia del cine se lo ha agradecido, así que yo voy a esperar a Uma, porque ella es mi actriz".
"Kill Bill" es, según su propio director y guionista, "un homenaje a los 'spaghetti westerns', la películas con mujeres peleonas y los 'thrillers' de Charles Bronson". Poco más se sabe de la historia aparte de que Thurman interpretará a una mujer que va vestida de novia durante buena parte del metraje. Cuando finalice el rodaje de "Kill Bill", cuyo estreno se prevé para mediados del 2003, Tarantino comenzará la preproducción de "Inglorious bastards", ua película de aventuras bélicas que tiene por referente títulos como "Doce del patíbulo" o "El desafío de las águilas". Después del éxito ("Reservoir dogs", "Pulp Fiction") y del relativo fracaso ("Jackie Brown"), el director se enfrenta así, con estos dos proyectos, a una nueva prueba de fuego.
Tras casi cuatro años después del estreno de "Jackie Brown", Quentin Tarantino parece dispuesto al fin a volver a ponerse tras la cámara. El director, que fascinó al mundo con dos películas, "Reservoir dogs" y "Pulp Fiction" ("Jackie Brown" tuvo cierto éxito crítico, pero pasó desapercibida entre el público) y creó escuela inmediata entre los jóvenes realizadores de su generación, quiere acallar esos insistentes comentarios que hablan del "bluff Tarantino" para referirse a su declive y a su incapacidad para mantener el nivel de creatividad y originalidad que demostró, sobre todo, en sus dos primeros títulos y en guiones que dirigieron otros, como "Amor a quemarropa" ("True romance"), de Tony Scott, o "Abierto hasta el amanecer" ("From dusk till dawn"), de Robert Rodriguez. Tarantino se ha cansado de perder el tiempo interpretando penosos papeles en producciones como "Little Nicky" y tiene listos dos guiones que piensa rodar sucesivamente. "Todo irá a la perfección", declaró a Variety, "primero un film épico pequeño y después otro mucho mayor".
"Kill Bill" es el primero de los guiones que el director de "Reservoir dogs" convertirá en imágenes. Producido por Miramax, "Kill Bill" debería estar, a estas alturas, finalizando su filmación, pero el embarazo de la actriz Uma Thurman, para quien el guión fue especialmente escrito, ha retrasado el rodaje hasta la próxima primavera. Cuando se supo del embarazo de Thurman, Tarantino se planteó encontrar una sustituta, pero Miramax se negó en redondo. Finalmente, tanto el estudio como el director han decidido esperar a que la protagonista de "Pulp Fiction" esté lista para rodar (previamente, tendrá que entrenarse en diversas técnicas de defensa personal). "Me pregunté qué haría el director Joseph Von Sternberg en una situación como ésta", comentó Tarantino, "y me respondí que él siempre esperó a que Marlene Dietrich estuviera lista y la historia del cine se lo ha agradecido, así que yo voy a esperar a Uma, porque ella es mi actriz".
"Kill Bill" es, según su propio director y guionista, "un homenaje a los 'spaghetti westerns', la películas con mujeres peleonas y los 'thrillers' de Charles Bronson". Poco más se sabe de la historia aparte de que Thurman interpretará a una mujer que va vestida de novia durante buena parte del metraje. Cuando finalice el rodaje de "Kill Bill", cuyo estreno se prevé para mediados del 2003, Tarantino comenzará la preproducción de "Inglorious bastards", ua película de aventuras bélicas que tiene por referente títulos como "Doce del patíbulo" o "El desafío de las águilas". Después del éxito ("Reservoir dogs", "Pulp Fiction") y del relativo fracaso ("Jackie Brown"), el director se enfrenta así, con estos dos proyectos, a una nueva prueba de fuego.
- © Redacción-NOTICINE.com
Se muestran veintiséis minutos de "El señor de los anillos"
26-IX-01
A veces la expectación que despierta una película es tan grande, que cualquier resultado en pantalla termina siendo, en mayor o menor medida, decepcionante, incapaz de competir con la propia expectación creada. Algo así puede ocurrir a la anunciadísima y esperadísima trilogía con la que el director Peter Jackson pretende adaptar de manera definitiva un icono literario tan inconmensurablemente influyente como "El señor de los anillos" de J.R. Tolkien. Jackson, consciente de que era imposible atrapar el espíritu de los tres libros con un solo film, ha rodado, con un ajustado presupuesto de doscientos millones de dólares, tres películas simultáneamente, tres títulos que pretenden convertirse en clásicos inmediatos y que se estrenarán en las tres próximas temporadas navideñas. "La comunidad del anillo", primera entrega de la trilogía, desembarcará en las pantallas de todo el mundo el diecinueve de diciembre. Mientras, el flujo de rumores no cesa en los medios de comunicación cinematográficos, se multiplican las páginas en Internet dedicadas a especular sobre lo que Jackson ofrecerá a sus ansiosos espectadores y miles de usuarios descargan los trailers cada día. Se puede decir, quizás, que la parafernalia previa al estreno es todavía superior a la que hace dos años se organizó en torno al "Episodio 1" de Lucas.
Esta mañana, Aurum, la distribuidora de la trilogía en España, organizó un pase para prensa en Madrid con un montaje de imágenes de lo que se podrá disfrutar en "La comunidad del anillo". Tras superar un control casi policial que impidió que cualquiera de los asistentes a la proyección accediera a la sala con cámaras fotográficas o de vídeo con las que se pudiera reproducir cualquier extracto de lo que se iba a ver, comenzó la proyección de una especie de trailer gigante, de veintiséis minutos, presentado por el propio Peter Jackson, sentado en un carruaje junto a Gandalf (Ian McKellen). El montaje, el mismo que se presentó en el Festival de Cannes, carece en sí de coherencia narrativa (e intentaré describirlo partiendo del hecho de que no he leído las novelas y no he reconocido los pasajes a los que pertenecía cada parte): empieza con una secuencia que aparentemente corresponde al principio de la película (la llegada de Gandalf a la aldea en la que vive el "hobbit" Bilbo, interpretado por Ian Holm), pero pronto la supuesta linealidad temporal se rompe y, con una sucesión de planos breves, se atisba lo que ocurre con el misterioso anillo, que permite ser invisible a los que se lo ponen y es dejado en herencia al "hobbit" Frodo (Elijah Wood). Luego, se recurre, a modo de trailer convencional, a una sucesión de planos cohesionado por un tema instrumental (el de "Gladiator", compuesto por Hans Zimmer, por cierto), que da paso a lo que parece otra secuencia completa, en la que los personajes se adentran en una especie de templo de piedra habitado por violentas bestias; acaban con una de ellas y Frodo está a punto de morir, pero finalmente todos consiguen escapar a lo largo de una interminable escalera, si bien parece que otra bestia aún mucho mayor les espera. Después de esta incompleta secuencia de unos doce o trece minutos, la única que parece ser definitiva en la película y que cuenta con un ritmo realmente logrado y tenso y un genuino sabor a cine de aventuras clásico a pesar de que Jackson agita la cámara hasta extremos mareantes y de que los efectos visuales no están, a mi parecer, del todo a la altura, el montaje recurre de nuevo a los convencionalismos de un trailer y vuelve a ofrecer una avalancha de planos, más o menos espectaculares, esta vez mientras suena uno de los temas de la banda sonora de "El último mohicano".
¿El balance de lo visto? Apenas puedo opinar con justicia, ya que considero que esta desordenada proyección hace un flaco favor a una película que, por lo que he podido deducir, pretende primar la narración de una historia clásica y legendaria antes que brindar un simple espectáculo pirotécnico de efectos especiales, elemento que, a tenor de lo visto, no parece tan cuidado ni tan innovador como era de esperar (no hay nada nuevo en ellos, más allá del ya habitual empacho de criaturas y paisajes digitales). No hay duda de que es pronto para adelantar acontecimientos y las películas hay que juzgarlas tras haberlas disfrutado, o padecido, de principio a fin.
A veces la expectación que despierta una película es tan grande, que cualquier resultado en pantalla termina siendo, en mayor o menor medida, decepcionante, incapaz de competir con la propia expectación creada. Algo así puede ocurrir a la anunciadísima y esperadísima trilogía con la que el director Peter Jackson pretende adaptar de manera definitiva un icono literario tan inconmensurablemente influyente como "El señor de los anillos" de J.R. Tolkien. Jackson, consciente de que era imposible atrapar el espíritu de los tres libros con un solo film, ha rodado, con un ajustado presupuesto de doscientos millones de dólares, tres películas simultáneamente, tres títulos que pretenden convertirse en clásicos inmediatos y que se estrenarán en las tres próximas temporadas navideñas. "La comunidad del anillo", primera entrega de la trilogía, desembarcará en las pantallas de todo el mundo el diecinueve de diciembre. Mientras, el flujo de rumores no cesa en los medios de comunicación cinematográficos, se multiplican las páginas en Internet dedicadas a especular sobre lo que Jackson ofrecerá a sus ansiosos espectadores y miles de usuarios descargan los trailers cada día. Se puede decir, quizás, que la parafernalia previa al estreno es todavía superior a la que hace dos años se organizó en torno al "Episodio 1" de Lucas.
Esta mañana, Aurum, la distribuidora de la trilogía en España, organizó un pase para prensa en Madrid con un montaje de imágenes de lo que se podrá disfrutar en "La comunidad del anillo". Tras superar un control casi policial que impidió que cualquiera de los asistentes a la proyección accediera a la sala con cámaras fotográficas o de vídeo con las que se pudiera reproducir cualquier extracto de lo que se iba a ver, comenzó la proyección de una especie de trailer gigante, de veintiséis minutos, presentado por el propio Peter Jackson, sentado en un carruaje junto a Gandalf (Ian McKellen). El montaje, el mismo que se presentó en el Festival de Cannes, carece en sí de coherencia narrativa (e intentaré describirlo partiendo del hecho de que no he leído las novelas y no he reconocido los pasajes a los que pertenecía cada parte): empieza con una secuencia que aparentemente corresponde al principio de la película (la llegada de Gandalf a la aldea en la que vive el "hobbit" Bilbo, interpretado por Ian Holm), pero pronto la supuesta linealidad temporal se rompe y, con una sucesión de planos breves, se atisba lo que ocurre con el misterioso anillo, que permite ser invisible a los que se lo ponen y es dejado en herencia al "hobbit" Frodo (Elijah Wood). Luego, se recurre, a modo de trailer convencional, a una sucesión de planos cohesionado por un tema instrumental (el de "Gladiator", compuesto por Hans Zimmer, por cierto), que da paso a lo que parece otra secuencia completa, en la que los personajes se adentran en una especie de templo de piedra habitado por violentas bestias; acaban con una de ellas y Frodo está a punto de morir, pero finalmente todos consiguen escapar a lo largo de una interminable escalera, si bien parece que otra bestia aún mucho mayor les espera. Después de esta incompleta secuencia de unos doce o trece minutos, la única que parece ser definitiva en la película y que cuenta con un ritmo realmente logrado y tenso y un genuino sabor a cine de aventuras clásico a pesar de que Jackson agita la cámara hasta extremos mareantes y de que los efectos visuales no están, a mi parecer, del todo a la altura, el montaje recurre de nuevo a los convencionalismos de un trailer y vuelve a ofrecer una avalancha de planos, más o menos espectaculares, esta vez mientras suena uno de los temas de la banda sonora de "El último mohicano".
¿El balance de lo visto? Apenas puedo opinar con justicia, ya que considero que esta desordenada proyección hace un flaco favor a una película que, por lo que he podido deducir, pretende primar la narración de una historia clásica y legendaria antes que brindar un simple espectáculo pirotécnico de efectos especiales, elemento que, a tenor de lo visto, no parece tan cuidado ni tan innovador como era de esperar (no hay nada nuevo en ellos, más allá del ya habitual empacho de criaturas y paisajes digitales). No hay duda de que es pronto para adelantar acontecimientos y las películas hay que juzgarlas tras haberlas disfrutado, o padecido, de principio a fin.
- © Roberto Pérez Toledo-NOTICINE.com
Los atentados trastocan la agenda de Hollywood
24-IX-01
El film "Tick Tock", protagonizado por Jennifer Lopez y Samuel L. Jackson ha sido el último en cancelarse tras el atentado terrorista acaecido en la costa este de los Estados Unidos. El comienzo del rodaje estaba previsto para diciembre, pero ha sido retrasado seis meses. El argumento de la película gira en torno a una persona que sufre de amnesia y resulta ser el primer sospechoso de una serie de atentados en Los Angeles. Los productores fueron conscientes de que el argumento del film provocaría reacciones negativas en la opinión pública. Un representante de Sony Pictures declaró que "aún pretendemos realizar la película pero vamos a prestar una mayor atención a los elementos de la historia".
Pero "Tick Tock" no ha sido la única pelicula cuyo rodaje o incluso estreno ha sido retrasado por causa del desastre. La nueva apuesta de Arnold Schwarzenegger, el film "Collateral Damage", también ha sufrido un retraso en su estreno dado que su argumento gira en torno al terrorismo internacional. También la muy esperada "Spiderman" del director Sam Raimi ha tenido problemas en relación a su campaña de publicidad, en la que se utiliza insistentemente la imagen de las dos torres gemelas, tanto en los carteles de expectación como en el trailer. Dicho trailer tenía la mala fortuna de mostrar al helicóptero de los terroristas atrapado por la red del hombre araña entre las dos torres.
Algo distinta ha sido la razón para retirar los posters de "Last Castle", la última película de Robert Redford. Para su promoción se mostraba una bandera estadounidense boca abajo, lo que en jerga militar significa peligro. "Training Day" tampoco verá la luz este mes porque su protagonista es un policia corrupto. Por su parte los responsables de "Men in black 2" estan desarrollando un final alternativo que sustituya al original, en el que el World Trade Center era invadido por fuerzas extraterrestres. El terrible atentado nos ha mostrado que, una vez más, la realidad puede superar a la ficción.
El film "Tick Tock", protagonizado por Jennifer Lopez y Samuel L. Jackson ha sido el último en cancelarse tras el atentado terrorista acaecido en la costa este de los Estados Unidos. El comienzo del rodaje estaba previsto para diciembre, pero ha sido retrasado seis meses. El argumento de la película gira en torno a una persona que sufre de amnesia y resulta ser el primer sospechoso de una serie de atentados en Los Angeles. Los productores fueron conscientes de que el argumento del film provocaría reacciones negativas en la opinión pública. Un representante de Sony Pictures declaró que "aún pretendemos realizar la película pero vamos a prestar una mayor atención a los elementos de la historia".
Pero "Tick Tock" no ha sido la única pelicula cuyo rodaje o incluso estreno ha sido retrasado por causa del desastre. La nueva apuesta de Arnold Schwarzenegger, el film "Collateral Damage", también ha sufrido un retraso en su estreno dado que su argumento gira en torno al terrorismo internacional. También la muy esperada "Spiderman" del director Sam Raimi ha tenido problemas en relación a su campaña de publicidad, en la que se utiliza insistentemente la imagen de las dos torres gemelas, tanto en los carteles de expectación como en el trailer. Dicho trailer tenía la mala fortuna de mostrar al helicóptero de los terroristas atrapado por la red del hombre araña entre las dos torres.
Algo distinta ha sido la razón para retirar los posters de "Last Castle", la última película de Robert Redford. Para su promoción se mostraba una bandera estadounidense boca abajo, lo que en jerga militar significa peligro. "Training Day" tampoco verá la luz este mes porque su protagonista es un policia corrupto. Por su parte los responsables de "Men in black 2" estan desarrollando un final alternativo que sustituya al original, en el que el World Trade Center era invadido por fuerzas extraterrestres. El terrible atentado nos ha mostrado que, una vez más, la realidad puede superar a la ficción.
- © Redacción-NOTICINE.com
Hollywood se prepara para los Oscar
24-IX-01
En el horizonte cinematográfico pueden ya divisarse atractivas propuestas que ratifican que el segundo semestre se presenta lleno de interés y muy reñido de cara a los premios Oscar, con lo que el nivel de calidad está asegurado. Una de ellas es "Gangs of New York" de Martin Scorsese, un fresco de las luchas de pandillas callejeras en el Nueva York de mediados del siglo XIX con Leonardo Di Caprio y Daniel Day Lewis en los papeles protagonistas. La segunda es "Ali" del realizador Michael Mann, el retrato del boxeador Mohamed Ali desde sus comienzos hasta sus años de gloria interpretado por Will Smith junto a Mario Van Peebles. Por su parte, "Vanilla Sky", el esperado remake de la película de Alejandro Amenabar "Abre los ojos", Tom cruise deberá enfrentarse al desprecio de sus antiguos conocidos tras sufrir la desfiguración de su rostro en un grave accidente de tráfico.
Al parecer la amenaza de huelga en Hollywood por parte de actores y guionistas no hizo sino provocar el rodaje acelerado de films, por el temor que los estudios tenian a quedarse sin películas para el segundo semestre del año. Según Amir Malin, maxima cabeza de Artisan Entertainment, "durante este período habrá una sobreabundancia de filmes, empezando por un otoño primavera austral en que hay estrenos para todos los gustos" Además, este periodo es la época en la que comienzan a desfilar las primeras películas que suelen ser principales favoritas para los codiciados premios de la academia.
Una de estos films es "Don´t Say a Word". Protagonizado por Michael Douglas, se trata de un thriller en el que un psiquiatra debe complacer las extrañas peticiones de unos secuestradores con el fin de recuperar a su hija. Otro es "Bandits", la nueva película protagonizada por Bruce Willis al que secundan Billy Bob Thornton y Cate Blanchett, en la que se narra la tragicómica huida de dos ladrones de bancos que se enamoran de la mujer que tienen como rehén. Y tampoco podemos olvidarnos de "Ocean´s Eleven", la nueva apuesta de Steven Soderbergh, y que cuenta con un extensísimo reparto encabezado por Julia Roberts y George Clooney. En definitiva, propuestas para todos los gustos que nos harán disfrutar de una temporada de buen cine.
En el horizonte cinematográfico pueden ya divisarse atractivas propuestas que ratifican que el segundo semestre se presenta lleno de interés y muy reñido de cara a los premios Oscar, con lo que el nivel de calidad está asegurado. Una de ellas es "Gangs of New York" de Martin Scorsese, un fresco de las luchas de pandillas callejeras en el Nueva York de mediados del siglo XIX con Leonardo Di Caprio y Daniel Day Lewis en los papeles protagonistas. La segunda es "Ali" del realizador Michael Mann, el retrato del boxeador Mohamed Ali desde sus comienzos hasta sus años de gloria interpretado por Will Smith junto a Mario Van Peebles. Por su parte, "Vanilla Sky", el esperado remake de la película de Alejandro Amenabar "Abre los ojos", Tom cruise deberá enfrentarse al desprecio de sus antiguos conocidos tras sufrir la desfiguración de su rostro en un grave accidente de tráfico.
Al parecer la amenaza de huelga en Hollywood por parte de actores y guionistas no hizo sino provocar el rodaje acelerado de films, por el temor que los estudios tenian a quedarse sin películas para el segundo semestre del año. Según Amir Malin, maxima cabeza de Artisan Entertainment, "durante este período habrá una sobreabundancia de filmes, empezando por un otoño primavera austral en que hay estrenos para todos los gustos" Además, este periodo es la época en la que comienzan a desfilar las primeras películas que suelen ser principales favoritas para los codiciados premios de la academia.
Una de estos films es "Don´t Say a Word". Protagonizado por Michael Douglas, se trata de un thriller en el que un psiquiatra debe complacer las extrañas peticiones de unos secuestradores con el fin de recuperar a su hija. Otro es "Bandits", la nueva película protagonizada por Bruce Willis al que secundan Billy Bob Thornton y Cate Blanchett, en la que se narra la tragicómica huida de dos ladrones de bancos que se enamoran de la mujer que tienen como rehén. Y tampoco podemos olvidarnos de "Ocean´s Eleven", la nueva apuesta de Steven Soderbergh, y que cuenta con un extensísimo reparto encabezado por Julia Roberts y George Clooney. En definitiva, propuestas para todos los gustos que nos harán disfrutar de una temporada de buen cine.
- © Redacción-NOTICINE.com
Orígenes del alma artificial
21-IX-2001
El tema de la creación de vida de manera no natural se encuentra en la remonta época clásica, concretamente en los mitos de Pigmalión y Prometeo. En el primero, el creador "con técnica admirable esculpió con éxito un marfil blanco como la nieve y le dio una hermosura con la que ninguna mujer puede nacer, y se enamoró de su obra", la cual, gracias a la intervención de Venus (como nos narra Ovidio en las "Metamorfosis"), se convierte en humana. El creador es un escultor, un constructor de hombres, cualidad que también se le atribuye a Prometeo, que roba el fuego a los dioses para entregarlo a la humanidad.
En el siglo XIX, Mary Shelley recupera este mito haciendo de Prometeo un científico que en lugar de fuego utiliza la electricidad (el gran invento de la época) para crear vida artificial. Anterior a esta historia es la leyenda medieval del Golem según la cual podía construirse un hombre con arcilla roja y luego darle vida a través de una palabra mágica. Pero en "Frankenstein" todo es demostrable científicamente, y eso hace que este libro esté más cerca de la ciencia-ficción que de la novela gótica (aunque también tenga muchos elementos de ésta). La criatura resultante es fruto de la ciencia, y es tan monstruosa que provoca el rechazo de Victor Frankenstein hacia su creación, la cual es portadora de desgracias y muerte. Hecho que muchos han interpretado como un castigo de Dios por osadía del hombre, pero lo que en realidad hace cruel a esa criatura creada artificialmente es la negación afectiva por parte de su creador, de su padre. Lo único que el monstruo quiere es el amor fraternal que le es negado desde que nace.
"El hombre es bueno por naturaleza" dijo Rousseau. Y el ser artificial, ¿también lo es? ¿Hasta qué punto es capaz de amar y luchar por ser amado? El niño-robot de "A.I", David, ha sido programado para amar, pero su angustia se inicia cuando no es amado por su madre, cuando es rechazado por el objeto de su amor, igual que ocurre en "Frankenstein". Pero David no es vengativo, ni le crece la nariz como a Pinocho por decir mentiras, aunque comparte con este personaje de Carlo Collodi su deseo de querer ser un niño real. Lo mismo le sucede a "El hombre del Bicentenario", un excelente cuento de Isaac Asimov (también autor de "Yo, robot") que Chris Columbus adaptó para el cine en 1999. En este filme Robin Williams interpreta a Andrew, un robot con dotes para la pintura que quiere ser humano y sentir como tal. Otros seres cibernéticos a destacar son las máquinas de matar que aparecen en las películas de "Terminator" y los "replicantes" de "Blade Runner". Pero estos últimos, a diferencia de los primeros, parecen tener un alma que los humaniza aún más, hasta el punto de que una de estas creaciones es capaz de salvar al cazador de androides que los persigue hasta la muerte. El niño de "A.I." también tiene alma, y está hecha de la misma materia que la de Eduardo Manostijeras. En esta historia que se narra desde el principio como si fuera un cuento de hadas, Tim Burton mezcla "Frankenstein" con "Pinocho" y obtiene como resultado un ser que va a parar, igual que David, en una sociedad egoísta y cruel. Y a través de este niño, Spielberg muestra cómo los seres artificiales pueden llegar poseer una “calidad humana” muy superior a la del propio hombre.
El tema de la creación de vida de manera no natural se encuentra en la remonta época clásica, concretamente en los mitos de Pigmalión y Prometeo. En el primero, el creador "con técnica admirable esculpió con éxito un marfil blanco como la nieve y le dio una hermosura con la que ninguna mujer puede nacer, y se enamoró de su obra", la cual, gracias a la intervención de Venus (como nos narra Ovidio en las "Metamorfosis"), se convierte en humana. El creador es un escultor, un constructor de hombres, cualidad que también se le atribuye a Prometeo, que roba el fuego a los dioses para entregarlo a la humanidad.
En el siglo XIX, Mary Shelley recupera este mito haciendo de Prometeo un científico que en lugar de fuego utiliza la electricidad (el gran invento de la época) para crear vida artificial. Anterior a esta historia es la leyenda medieval del Golem según la cual podía construirse un hombre con arcilla roja y luego darle vida a través de una palabra mágica. Pero en "Frankenstein" todo es demostrable científicamente, y eso hace que este libro esté más cerca de la ciencia-ficción que de la novela gótica (aunque también tenga muchos elementos de ésta). La criatura resultante es fruto de la ciencia, y es tan monstruosa que provoca el rechazo de Victor Frankenstein hacia su creación, la cual es portadora de desgracias y muerte. Hecho que muchos han interpretado como un castigo de Dios por osadía del hombre, pero lo que en realidad hace cruel a esa criatura creada artificialmente es la negación afectiva por parte de su creador, de su padre. Lo único que el monstruo quiere es el amor fraternal que le es negado desde que nace.
"El hombre es bueno por naturaleza" dijo Rousseau. Y el ser artificial, ¿también lo es? ¿Hasta qué punto es capaz de amar y luchar por ser amado? El niño-robot de "A.I", David, ha sido programado para amar, pero su angustia se inicia cuando no es amado por su madre, cuando es rechazado por el objeto de su amor, igual que ocurre en "Frankenstein". Pero David no es vengativo, ni le crece la nariz como a Pinocho por decir mentiras, aunque comparte con este personaje de Carlo Collodi su deseo de querer ser un niño real. Lo mismo le sucede a "El hombre del Bicentenario", un excelente cuento de Isaac Asimov (también autor de "Yo, robot") que Chris Columbus adaptó para el cine en 1999. En este filme Robin Williams interpreta a Andrew, un robot con dotes para la pintura que quiere ser humano y sentir como tal. Otros seres cibernéticos a destacar son las máquinas de matar que aparecen en las películas de "Terminator" y los "replicantes" de "Blade Runner". Pero estos últimos, a diferencia de los primeros, parecen tener un alma que los humaniza aún más, hasta el punto de que una de estas creaciones es capaz de salvar al cazador de androides que los persigue hasta la muerte. El niño de "A.I." también tiene alma, y está hecha de la misma materia que la de Eduardo Manostijeras. En esta historia que se narra desde el principio como si fuera un cuento de hadas, Tim Burton mezcla "Frankenstein" con "Pinocho" y obtiene como resultado un ser que va a parar, igual que David, en una sociedad egoísta y cruel. Y a través de este niño, Spielberg muestra cómo los seres artificiales pueden llegar poseer una “calidad humana” muy superior a la del propio hombre.
- © Helena Mas-NOTICINE.com