Woody Allen confiesa que le falta pasión para hacer cine
- por © Redacción-NOTICINE.com
31-X-07
El neoyorquino Woody Allen tiene una película en cartelera, "El sueño de Cassandra", y una en la sala de montaje, "Vicky Cristina Barcelona", pero pese al ritmo de trabajo que lleva, el cineasta ha confesado que a esta altura de su vida, a su carrera le falta pasión.
"Tengo ganas de avanzar y terminar la película. Me falta pasión", aseguró Allen en entrevista con Le Figaro, afirmando que hoy día ya no le preocupa la precisión de un plano, sino el terminar la jornada y volver a casa junto a los suyos. Esta carencia de pasión por el séptimo arte se ha evidenciado en los últimos años, donde aunque prosigue su rutina de entregar una película por año, la calidad de su cine no es el de antaño.
Allen contó además, que su inclinación por la comedia no fue algo buscado, sino a lo que fue empujado al comprobarse que tenía buena mano para el género y que eso podía ser redituable. "El cine es un arte dependiente del dinero. Yo podía hacer reír y me han empujado en esa dirección", dijo, explicando que su interés primario eran las tragedias griegas, algo en lo que incursiona con su más reciente cinta, "El sueño de Cassandra", protagonizada por Ewan McGregor y Colin Farrell.
Aún con el camino que le fue marcado por la industria, Allen entiende que de alguna manera consiguió seguir su senda: "No tengo la impresión de que mi carrera haya cambiado de manera radical. Hay personas que encuentran mis comedias llenas de tristeza. Creo que no soy puramente cómico ni enteramente trágico, sino simplemente realista".
Para el próximo año, Allen -de 72 años- lanzará "Vicky Cristina Barcelona", película rodada en España con Javier Bardem, Penélope Cruz y Scarlett Johansson como protagonistas.
El neoyorquino Woody Allen tiene una película en cartelera, "El sueño de Cassandra", y una en la sala de montaje, "Vicky Cristina Barcelona", pero pese al ritmo de trabajo que lleva, el cineasta ha confesado que a esta altura de su vida, a su carrera le falta pasión.
"Tengo ganas de avanzar y terminar la película. Me falta pasión", aseguró Allen en entrevista con Le Figaro, afirmando que hoy día ya no le preocupa la precisión de un plano, sino el terminar la jornada y volver a casa junto a los suyos. Esta carencia de pasión por el séptimo arte se ha evidenciado en los últimos años, donde aunque prosigue su rutina de entregar una película por año, la calidad de su cine no es el de antaño.
Allen contó además, que su inclinación por la comedia no fue algo buscado, sino a lo que fue empujado al comprobarse que tenía buena mano para el género y que eso podía ser redituable. "El cine es un arte dependiente del dinero. Yo podía hacer reír y me han empujado en esa dirección", dijo, explicando que su interés primario eran las tragedias griegas, algo en lo que incursiona con su más reciente cinta, "El sueño de Cassandra", protagonizada por Ewan McGregor y Colin Farrell.
Aún con el camino que le fue marcado por la industria, Allen entiende que de alguna manera consiguió seguir su senda: "No tengo la impresión de que mi carrera haya cambiado de manera radical. Hay personas que encuentran mis comedias llenas de tristeza. Creo que no soy puramente cómico ni enteramente trágico, sino simplemente realista".
Para el próximo año, Allen -de 72 años- lanzará "Vicky Cristina Barcelona", película rodada en España con Javier Bardem, Penélope Cruz y Scarlett Johansson como protagonistas.