Estreno: "El buen pastor", la fascinación de Robert De Niro por el espionaje
- por © Redacción-NOTICINE.com
5-IV-07
El actor, director y productor Robert De Niro siempre ha sentido fascinación por el mundo del espionaje, y deseoso de conocer sus claves por pura curiosidad personal, empezó a recopilar información desde los años 90, sin estar demasiado seguro de que algún día haría una película. Sin embargo dos factores acabaron empujándole a ello, el conocer personalmente a un experimentado agente y el guión de Eric Roth.
Un amigo presentó al cineasta a Milton Bearden, un agente de la CIA jubilado después de 30 años de servicio y que se convertiría más adelante en el primer asesor técnico de la película. El ex espía, que se encargaba de las operaciones de la CIA en Afganistán a mediados de los ochenta, aceptó llevar a Robert De Niro por Europa y Asia en un viaje didáctico y enseñarle cómo se obtiene información.
Desde Afganistán, cruzaron a Pakistán y llegaron hasta Moscú para que Robert De Niro viera por sí mismo lo que quería contar en la película. Durante este viaje y en la investigación que llevó a cabo, el actor/director obtuvo información que está al alcance de muy pocos. "Me parece que Bob conoce mejor a la gente de la CIA, a los agentes de mi generación y de la generación anterior, que cualquier otra persona que no pertenezca a este mundo", ha dicho Bearden.
La fascinación de Robert De Niro por el espionaje seguió creciendo durante varios años antes de que le llegara una copia del guión de "El buen pastor", escrito por Eric Roth, acerca de los primeros años de la CIA y, casualmente, con los temas que tanto le intrigaban. La productora Jane Rosenthal recuerda: "Bob no lo dudó un momento y dijo: ‘No sólo quiero hacer el papel, también quiero dirigir la película’".
El guionista, autor de películas tan famosas como "Forrest Gump", "El dilema/The Insider", "Ali" y "Munich", había creado una historia en la que se mezclaban elementos de un auténtico thriller de calidad con la vida diaria de los agentes que crearon la Agencia. Roth estaba interesado en un periodo anterior al que Robert De Niro y Milton Bearden habían investigado, pero no tardaron en encontrar puntos comunes. "Me intrigaba la CIA y cómo se había formado", dice el guionista. "La Agencia empezó con unas 17 ó 18 personas, y ahora tiene una plantilla de 29.000".
Basó el relato en los acontecimientos clave de la historia de la CIA - el guión empieza con la OSS en la II Guerra Mundial y acaba en la época del fracaso de la CIA en la misión crucial de la bahía Cochinos en 1961 - y estudió la vida de los hombres que formaron el servicio de espionaje actual.
La guinda del proceso de gestación de la película fue la creciente presencia de los servicios secretos en la vida norteamericana e internacional tras el 11-S. En junio de 2005, Morgan Creek se unió a la productora de De Niro, Tribeca, para producir "El buen pastor", que pretendía reflejar la actividad de la CIA desde sus inicios, sin olvidar el álgido momento de la Guerra Fría, con fidelidad a los hechos históricos pero también a través de una historia personal más o menos ficticia. "Es una mezcla de acontecimientos reales y personajes inventados. Si nos hubiésemos limitado meramente a describir hechos, sería otro tipo de película".
El reparto está sin duda a la altura del proyecto: Matt Damon, Angelina Jolie, John Turturro, Joe Pesci, Alec Baldwin, William Hurt, Timothy Hutton, Michael Gambon, Billy Crudup y el propio De Niro.
Durante el rodaje, que se desarrolló en Nueva York, y otros lugares de EEUU, así como en Londres y República Dominicana, el director Robert De Niro nunca vaciló. "No sé cómo aguanta Bob, no sé de dónde saca tanta energía", dice el productor James G. Robinson. "Es un perfeccionista nato". Angelina Jolie y Matt Damon corroboran el sentimiento general en cuanto a la habilidad de Robert De Niro a la hora de dirigir actores. "Nos permite ser muy atrevidos", dice la actriz. "Hacía tiempo que no había tenido la oportunidad de trabajar tan bien". "Deja que los actores hagan cosas de forma natural", concluye Matt Damon. "Ya lo dice Bob: ‘Es como una novela, hay que dejar que la gente la lea’".
El actor, director y productor Robert De Niro siempre ha sentido fascinación por el mundo del espionaje, y deseoso de conocer sus claves por pura curiosidad personal, empezó a recopilar información desde los años 90, sin estar demasiado seguro de que algún día haría una película. Sin embargo dos factores acabaron empujándole a ello, el conocer personalmente a un experimentado agente y el guión de Eric Roth.
Un amigo presentó al cineasta a Milton Bearden, un agente de la CIA jubilado después de 30 años de servicio y que se convertiría más adelante en el primer asesor técnico de la película. El ex espía, que se encargaba de las operaciones de la CIA en Afganistán a mediados de los ochenta, aceptó llevar a Robert De Niro por Europa y Asia en un viaje didáctico y enseñarle cómo se obtiene información.
Desde Afganistán, cruzaron a Pakistán y llegaron hasta Moscú para que Robert De Niro viera por sí mismo lo que quería contar en la película. Durante este viaje y en la investigación que llevó a cabo, el actor/director obtuvo información que está al alcance de muy pocos. "Me parece que Bob conoce mejor a la gente de la CIA, a los agentes de mi generación y de la generación anterior, que cualquier otra persona que no pertenezca a este mundo", ha dicho Bearden.
La fascinación de Robert De Niro por el espionaje seguió creciendo durante varios años antes de que le llegara una copia del guión de "El buen pastor", escrito por Eric Roth, acerca de los primeros años de la CIA y, casualmente, con los temas que tanto le intrigaban. La productora Jane Rosenthal recuerda: "Bob no lo dudó un momento y dijo: ‘No sólo quiero hacer el papel, también quiero dirigir la película’".
El guionista, autor de películas tan famosas como "Forrest Gump", "El dilema/The Insider", "Ali" y "Munich", había creado una historia en la que se mezclaban elementos de un auténtico thriller de calidad con la vida diaria de los agentes que crearon la Agencia. Roth estaba interesado en un periodo anterior al que Robert De Niro y Milton Bearden habían investigado, pero no tardaron en encontrar puntos comunes. "Me intrigaba la CIA y cómo se había formado", dice el guionista. "La Agencia empezó con unas 17 ó 18 personas, y ahora tiene una plantilla de 29.000".
Basó el relato en los acontecimientos clave de la historia de la CIA - el guión empieza con la OSS en la II Guerra Mundial y acaba en la época del fracaso de la CIA en la misión crucial de la bahía Cochinos en 1961 - y estudió la vida de los hombres que formaron el servicio de espionaje actual.
La guinda del proceso de gestación de la película fue la creciente presencia de los servicios secretos en la vida norteamericana e internacional tras el 11-S. En junio de 2005, Morgan Creek se unió a la productora de De Niro, Tribeca, para producir "El buen pastor", que pretendía reflejar la actividad de la CIA desde sus inicios, sin olvidar el álgido momento de la Guerra Fría, con fidelidad a los hechos históricos pero también a través de una historia personal más o menos ficticia. "Es una mezcla de acontecimientos reales y personajes inventados. Si nos hubiésemos limitado meramente a describir hechos, sería otro tipo de película".
El reparto está sin duda a la altura del proyecto: Matt Damon, Angelina Jolie, John Turturro, Joe Pesci, Alec Baldwin, William Hurt, Timothy Hutton, Michael Gambon, Billy Crudup y el propio De Niro.
Durante el rodaje, que se desarrolló en Nueva York, y otros lugares de EEUU, así como en Londres y República Dominicana, el director Robert De Niro nunca vaciló. "No sé cómo aguanta Bob, no sé de dónde saca tanta energía", dice el productor James G. Robinson. "Es un perfeccionista nato". Angelina Jolie y Matt Damon corroboran el sentimiento general en cuanto a la habilidad de Robert De Niro a la hora de dirigir actores. "Nos permite ser muy atrevidos", dice la actriz. "Hacía tiempo que no había tenido la oportunidad de trabajar tan bien". "Deja que los actores hagan cosas de forma natural", concluye Matt Damon. "Ya lo dice Bob: ‘Es como una novela, hay que dejar que la gente la lea’".