Soderbergh produce documental sobre el juicio a Polanski
- por © Redacción-NOTICINE.com
10-XI-06
Es de conocimiento público la acusación de abuso de menores que pesa sobre Roman Polanski en Estados Unidos, de donde huyó para no ser encarcelado por mantener relaciones sexuales con una jovencita de 13 años, amparándose en la constitución francesa que no permite que sus ciudadanos sean extraditados por crímenes sexuales. Mientras el mundo del cine ha tomado este episodio como fuente de bromas e ironías, la documentalista Marina Zenovich ha decidido abordar el tema con seriedad y explorar el juicio al que fue sometido el cineasta, contando para esta empresa con la producción de Steven Soderbergh.
Cuando en el año 2002 Polanski, de 73 años, obtuvo el Oscar como mejor director por "El pianista", su ausencia de la gala para recoger la estatuilla dorada no necesitaba demasiada explicación, era sabido que el director corría el riesgo de quedar detenido por haber optado por salir del país tras ser acusado ante la justicia por abuso de menores. Pero ello sirvió a la prensa estadounidense para reabrir un debate sobre el caso y en una entrevista con la CNN, Samantha Geiger, hoy una mujer que supera los 40 años y madre de tres hijos, que fue esa chica de 13 años que mantuvo relaciones con Polanski, declaró que la salida del país del realizador fue "uno de los capítulos más tristes de la historia judicial norteamericana".
Valiéndose de esa frase, Zenovich comenzó a planear un documental donde se retratara los pormenores de un caso que es de conocimiento público, pero cuyos detalles son desconocidos. "El asunto Polanski no me cerraba. Quería echar un poco de luz sobre lo que luego se reveló como una de las condenas más infames jamás enunciadas por un tribunal norteamericano", explicó la directora a Corriere della Sera sobre su proyecto, que se encuentra en producción con vistas a un estreno en 2007.
A priori, el documental, coproducido por Soderbergh, se adelanta como una mirada determinante sobre el caso, tomando en cuenta que Zenovich trabaja desde hace tres años en el mismo y ha conseguido las valiosas declaraciones de la mismísima Geiger y de figuras relacionadas con Polanski como Mia Farrow y Nastassja Kinski, protagonistas de "La semilla del diablo" y "Tess", respectivamente, si bien no logró contar con la voz del protagonista principal de esta historia: Polanski, quien se excusó de participar.
Pero no sólo Geiger y Polanski son el centro de este documental sino también Laurence J. Rittenband, juez fallecido en 1993 que estaba embriagado por los flashes y la popularidad que le otorgaba el caso, cuya fachada moralista se contradecía con su espíritu libertino.
Tras tanto tiempo de investigación para Zenovich la conclusión es clara: "Polanski fue víctima del fallo de un juez parcial y de comportamiento incorrecto que aplicó al director una pena excepcionalmente desproporcionada con relación al hecho. Debe quedar bien claro, por supuesto, que acostarse con una menor es un delito, pero la mayor parte del público ignora que Polanski ya había cumplido la pena correspondiente antes de caer en la enloquecida red tramada por el juez".
Es de conocimiento público la acusación de abuso de menores que pesa sobre Roman Polanski en Estados Unidos, de donde huyó para no ser encarcelado por mantener relaciones sexuales con una jovencita de 13 años, amparándose en la constitución francesa que no permite que sus ciudadanos sean extraditados por crímenes sexuales. Mientras el mundo del cine ha tomado este episodio como fuente de bromas e ironías, la documentalista Marina Zenovich ha decidido abordar el tema con seriedad y explorar el juicio al que fue sometido el cineasta, contando para esta empresa con la producción de Steven Soderbergh.
Cuando en el año 2002 Polanski, de 73 años, obtuvo el Oscar como mejor director por "El pianista", su ausencia de la gala para recoger la estatuilla dorada no necesitaba demasiada explicación, era sabido que el director corría el riesgo de quedar detenido por haber optado por salir del país tras ser acusado ante la justicia por abuso de menores. Pero ello sirvió a la prensa estadounidense para reabrir un debate sobre el caso y en una entrevista con la CNN, Samantha Geiger, hoy una mujer que supera los 40 años y madre de tres hijos, que fue esa chica de 13 años que mantuvo relaciones con Polanski, declaró que la salida del país del realizador fue "uno de los capítulos más tristes de la historia judicial norteamericana".
Valiéndose de esa frase, Zenovich comenzó a planear un documental donde se retratara los pormenores de un caso que es de conocimiento público, pero cuyos detalles son desconocidos. "El asunto Polanski no me cerraba. Quería echar un poco de luz sobre lo que luego se reveló como una de las condenas más infames jamás enunciadas por un tribunal norteamericano", explicó la directora a Corriere della Sera sobre su proyecto, que se encuentra en producción con vistas a un estreno en 2007.
A priori, el documental, coproducido por Soderbergh, se adelanta como una mirada determinante sobre el caso, tomando en cuenta que Zenovich trabaja desde hace tres años en el mismo y ha conseguido las valiosas declaraciones de la mismísima Geiger y de figuras relacionadas con Polanski como Mia Farrow y Nastassja Kinski, protagonistas de "La semilla del diablo" y "Tess", respectivamente, si bien no logró contar con la voz del protagonista principal de esta historia: Polanski, quien se excusó de participar.
Pero no sólo Geiger y Polanski son el centro de este documental sino también Laurence J. Rittenband, juez fallecido en 1993 que estaba embriagado por los flashes y la popularidad que le otorgaba el caso, cuya fachada moralista se contradecía con su espíritu libertino.
Tras tanto tiempo de investigación para Zenovich la conclusión es clara: "Polanski fue víctima del fallo de un juez parcial y de comportamiento incorrecto que aplicó al director una pena excepcionalmente desproporcionada con relación al hecho. Debe quedar bien claro, por supuesto, que acostarse con una menor es un delito, pero la mayor parte del público ignora que Polanski ya había cumplido la pena correspondiente antes de caer en la enloquecida red tramada por el juez".