ESTRENO: "Brokeback Mountain-En terreno vedado", la naturaleza del amor
- por © Redacción-NOTICINE.com
20-I-06
"Es una gran historia de amor americana y universal", así define Ang Lee a su más reciente película, "Brokeback Mountain-En terreno vedado", una cinta que acaba de desembarcar en las salas españolas, precedida por la obtención del Léon de Oro del Festival de Venecia, los numerosos premios de la crítica norteamericana, la consagración en los Globos de Oro y su prohibición en las ciudades más conservadoras del Estados Unidos profundo. ¿Qué caracteriza a esta producción que ha despertado tanto interés y es gran favorita para los premios Oscar? Pues que su historia de amor está protagonizada por dos vaqueros.
Son los años 60 en Signal (Wyoming). Ennis Del Mar (Heath Ledger) y Jack Twist (Jake Gyllenhaal) se conocen mientras hacen cola para pedir trabajo a Joe Aguirre (Randy Quaid), el ranchero del pueblo. Ambos jóvenes tienen muy claro el futuro que desean: conseguir un trabajo fijo, casarse y tener hijos. Sin embargo, algo en su interior les hace buscar algo más. Joe Aguirre les manda de pastores a la majestuosa montaña Brokeback y, poco a poco, lo que empieza como amistad se convierte en algo más profundo. Pero llega el verano y deben retornar a sus vidas y separarse. Ennis se queda en Wyoming y contrae matrimonio con Alma (Michelle Williams), su novia de siempre, con la que tendrá dos hijas mientras se gana la vida a duras penas. Jack ha vuelto a Texas y enamora a Lureen Newsome (Anne Hathaway), la reina del rodeo; entonces se casan, tienen un hijo y Jack comienza a trabajar en los negocios del padre de su mujer. Transcurren cuatro años. Un buen día, Ennis recibe una postal de Jack que viene a Wyoming. Ennis le espera impaciente y, cuando por fin llega, les basta un segundo para darse cuenta de que el cariño que sienten el uno por el otro ha aumentado con el tiempo. En los años siguientes, Ennis y Jack luchan por su unión secreta. Se ven varias veces al año, pero cuando no están juntos, se enfrentan a la eterna cuestión de la fidelidad, de la entrega y de la confianza.
"Si un proyecto no es arriesgado y sensible seguramente me interese poco", asegura Lee y "Brokeback Mountain-En terreno vedado" es sin duda una cinta que encuadra perfectamente dentro de este concepto, ya que el taiwanés ha tenido el valor de meterse con toda una institución americana, que es sinónimo de virilidad: el vaquero. Sin embargo, Lee -que irónicamente en la gala de los Globos de Oro recibió su premio de mejor director de manos de Clint Eastwood- asegura que no era su intención escarbar en esa ambigüedad que muchos westerns han sugerido, sino mostrar una historia de amor en un ámbito menos conocido para el gran público. "Conocemos el Oeste de las películas, el romántico mundo de los pistoleros. Pero no creo que el resto del mundo conozca el auténtico Oeste. Para la gente como yo, me refiero a extranjeros, yo soy de Taiwán, Estados Unidos es Nueva York o la costa oeste. Pero existe una inmensidad rural que desconocemos. Esta película cuenta una historia de amor entre gente que vive allí. Me parece importante que se conozca ese lado de Estados Unidos. También tienen su corazón, pero no suelen hablar mucho. Hay que escarbar para encontrarlo, pero merece la pena".
Como en todo film de Lee, se pone de manifiesto el enfrentamiento entre la tradición y la modernidad. El personaje de Ledger representa esos valores que impone la sociedad de forma tan arbitraria como hipócrita, mientras que Gyllenhaal cubre el rol de aquel que se rebela contra esa imposición, persiguiendo su propia felicidad. Ese es el conflicto que viven estos dos amantes, quienes experimentan con la misma intensidad pero de forma tan diferente ese gran amor, que solo pueden vivir con libertad en un paraje de ensueño y aislado, lejos de las miradas inquisidoras.
"Es una gran historia de amor americana y universal", así define Ang Lee a su más reciente película, "Brokeback Mountain-En terreno vedado", una cinta que acaba de desembarcar en las salas españolas, precedida por la obtención del Léon de Oro del Festival de Venecia, los numerosos premios de la crítica norteamericana, la consagración en los Globos de Oro y su prohibición en las ciudades más conservadoras del Estados Unidos profundo. ¿Qué caracteriza a esta producción que ha despertado tanto interés y es gran favorita para los premios Oscar? Pues que su historia de amor está protagonizada por dos vaqueros.
Son los años 60 en Signal (Wyoming). Ennis Del Mar (Heath Ledger) y Jack Twist (Jake Gyllenhaal) se conocen mientras hacen cola para pedir trabajo a Joe Aguirre (Randy Quaid), el ranchero del pueblo. Ambos jóvenes tienen muy claro el futuro que desean: conseguir un trabajo fijo, casarse y tener hijos. Sin embargo, algo en su interior les hace buscar algo más. Joe Aguirre les manda de pastores a la majestuosa montaña Brokeback y, poco a poco, lo que empieza como amistad se convierte en algo más profundo. Pero llega el verano y deben retornar a sus vidas y separarse. Ennis se queda en Wyoming y contrae matrimonio con Alma (Michelle Williams), su novia de siempre, con la que tendrá dos hijas mientras se gana la vida a duras penas. Jack ha vuelto a Texas y enamora a Lureen Newsome (Anne Hathaway), la reina del rodeo; entonces se casan, tienen un hijo y Jack comienza a trabajar en los negocios del padre de su mujer. Transcurren cuatro años. Un buen día, Ennis recibe una postal de Jack que viene a Wyoming. Ennis le espera impaciente y, cuando por fin llega, les basta un segundo para darse cuenta de que el cariño que sienten el uno por el otro ha aumentado con el tiempo. En los años siguientes, Ennis y Jack luchan por su unión secreta. Se ven varias veces al año, pero cuando no están juntos, se enfrentan a la eterna cuestión de la fidelidad, de la entrega y de la confianza.
"Si un proyecto no es arriesgado y sensible seguramente me interese poco", asegura Lee y "Brokeback Mountain-En terreno vedado" es sin duda una cinta que encuadra perfectamente dentro de este concepto, ya que el taiwanés ha tenido el valor de meterse con toda una institución americana, que es sinónimo de virilidad: el vaquero. Sin embargo, Lee -que irónicamente en la gala de los Globos de Oro recibió su premio de mejor director de manos de Clint Eastwood- asegura que no era su intención escarbar en esa ambigüedad que muchos westerns han sugerido, sino mostrar una historia de amor en un ámbito menos conocido para el gran público. "Conocemos el Oeste de las películas, el romántico mundo de los pistoleros. Pero no creo que el resto del mundo conozca el auténtico Oeste. Para la gente como yo, me refiero a extranjeros, yo soy de Taiwán, Estados Unidos es Nueva York o la costa oeste. Pero existe una inmensidad rural que desconocemos. Esta película cuenta una historia de amor entre gente que vive allí. Me parece importante que se conozca ese lado de Estados Unidos. También tienen su corazón, pero no suelen hablar mucho. Hay que escarbar para encontrarlo, pero merece la pena".
Como en todo film de Lee, se pone de manifiesto el enfrentamiento entre la tradición y la modernidad. El personaje de Ledger representa esos valores que impone la sociedad de forma tan arbitraria como hipócrita, mientras que Gyllenhaal cubre el rol de aquel que se rebela contra esa imposición, persiguiendo su propia felicidad. Ese es el conflicto que viven estos dos amantes, quienes experimentan con la misma intensidad pero de forma tan diferente ese gran amor, que solo pueden vivir con libertad en un paraje de ensueño y aislado, lejos de las miradas inquisidoras.