ESTRENO: Diane Lane busca amor a través de Internet

por © Redacción-NOTICINE.com
Imágenes del film
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23-IX-05

Hallar a la persona ideal, esa alma gemela que nos completa, siempre ha sido una empresa por demás difícil, pero en nuestros tiempos se tiene la ventaja de contar con los avances de la tecnología, que han proporcionado una herramienta tan poderosa como es el Internet, capaz de conectar las vidas de dos desconocidos de diferentes partes del mundo, que quizá nunca hubiesen cruzado sus caminos de forma tradicional. Esa realidad es la que plantea "...Y que le gusten los perros", una comedia romántica protagonizada por una pareja tan atractiva como la conformada por Diane Lane y John Cusack, que acaba de llegar a las salas españolas y también a las latinoamericanas, donde se lanzó bajo el título de "Se busca pareja".

La historia de esta cinta sigue a la profesora de kindergarten Sarah Nolan (Lane), una mujer de treinta y tantos años, que se ha divorciado hace ocho meses, razón por la cual su familia decide encontrarle un compañero para acabar con su soledad. Sus hermanas, Carol (Elizabeth Perkins) y Christine (Ali Hillis), son las más entusiastas y ante la negativa de conocer hombres, deciden hacerse pasar por ella he inscribirla en un sitio de Internet, destinada a formar pareja. Por otra parte, Jake Anderson (Cusack), un intenso constructor de barcos, cuya referencia en el plano del amor es la película "Dr. Zhivago", también acaba de separarse y su amigo decide inscribirlo en el mismo lugar. Ambos son presionados para tener una cita, que no será lo que esperaban, pero sin duda una chispa se ha encendido allí. Asimismo, Sarah conoce al padre de uno sus alumnos (Dermot Mulroney), un seductor que se adelanta como una persona adecuada para ella.

Claire Cook es la autora del libro en que se basa esta película, escrita y dirigida por Gary David Goldberg. "Quisimos explorar la búsqueda del amor de una mujer en un mundo cada vez más frenético. La vida de Sarah Nolan no resultó exactamente como ella esperaba. Ahora está en un momento de transición. Tiene que reunir el coraje suficiente para salir de allí, e intentarlo otra vez, y el mundo no parece ser tan hospitalario o compasivo como debería. Es un lugar incómodo y raro muchas veces, lleno de humanos en aprietos con los que todos podemos identificarnos", explica el realizador acerca de este viaje al universo de una mujer, como tantas, que busca una nueva oportunidad en el amor.

Lo que buscaba Goldberg al abordar este film es que sus hechos tuvieran la mayor naturalidad posible, que las situaciones que presente puedan ser absolutamente reconocibles para los espectadores. "La clase de comedia que a mí me interesa está basada en la realidad, detonar risas legítimas, desde un terreno que es familiar para la gente. Yo busco la risa de la gente que se ve reflejada en la película, en los momentos diarios de la vida cotidiana, las que el público mira y piensa ‘¡Hey!, ¡ese soy yo!’ o ‘esa es mi hermana, mi hermano, mi mejor amigo.’ Te puedes sentar allí y reírte de ti mismo y de tus propias debilidades, sabiendo que no estás solo".

Más allá del buen tono que mantiene el film a lo largo de su metraje, no exento de clichés, el gran acierto de esta producción reside en su compacto reparto, que funciona como un perfecto engranaje. "Todo comenzaba con Diane Lane, porque virtualmente ella está en cada escena", comenta Goldberg, quien subraya el manejo de los tiempos y talento natural para la comedia de esta actriz, que tanta humanidad sabe otorgarle a sus personajes. Lane se entusiasmo con su personaje desde la primera vez que leyó el guión y le atrajo de la historia ese cambio en los roles tradiciones de las películas románticas, ya que aquí "es Jake el que está buscando algo significativo desde el comienzo. El realmente no quiere perder el tiempo con alguien que no sienta del mismo modo que él. En cambio, Sarah recién está probando las aguas, y preferiría mantener las cosas un poco más a la ligera. Es interesante y reconfortante ver a un hombre con este punto de vista nada común".

Dentro de su elenco -donde se cuentan también Christopher Plummer, como el padre de Lane, y Stockard Channing, como una de las novias de este hombre- se destaca Elizabeth Perkins, actriz que en los años 80 supo ser una de las intérpretes más requeridas por sus papeles en "Big" y "Él dijo, ella dijo", que por estos años se dedica a hacer grandes los pequeños personajes que le tocan. Aquí es la hermana mayor, entrometida y sarcástica del personaje de Lane; algo que siendo la menor de tres hermanas, le significó "la posibilidad de poner en práctica algunas de mis fantasías de ser la mandona, un privilegio que disfruté a conciencia. Eso, sumado a que yo pienso que mi personaje tiene algunas de las mejores frases, porque Carol siempre tiene que tener la última palabra". La interacción de Lane con Perkins se vio favorecida además por el hecho de que son mejores amigas en la vida real y para Lane, siendo hija única, Perkins "es lo más parecido a una hermana real".

La química de la protagonista con todo el reparto es tan vital como con la de su coprotagonista, Cusack, ya que esta cinta es un viaje al mundo de una mujer en un momento de crisis, donde no solo se explora su búsqueda del amor, sino también la complejidad y el encanto de las relaciones familiares y humanas.