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18-II-05

Jack y Miles son dos viejos amigos que deciden emprender un viaje por la zona vitivinícola de Santa Bárbara, como forma original de despedir a Jack de la vida de soltero. Las motivaciones de este periplo son tan distintas como sus personalidades. Para Jack esos días son la última oportunidad de intimar con cuanta señorita se cruce por su camino, mientras que para Miles representa un modo de evadirse de su triste realidad -el divorcio de la mujer que ama y el poco interés que genera su nuevo libro-, por medio del gran placer de su vida: los vinos. En su recorrido conocerán a dos mujeres que los conmoverán de formas muy diferentes.

Bajo esa premisa, Alexander Payne logra una pequeña gran película, "Entre copas", que se ha transformado en la producción favorita de la mayoría de los círculos de críticos norteamericanos en 2004 y ha acumulado nominaciones en las principales premiaciones estadounidenses (Oscar, Globo de Oro, SAG, Independent Spirit Awards), ganando el Globo de Oro de mejor comedia.

En esta cinta de 16 millones de dólares, que acaba de estrenarse en España y Argentina y el 25 de febrero llegará a las salas mexicanas, Payne narra otra historia sobre personas comunes y corrientes en un momento de crisis, como ya lo hiciera en "Citizen Ruth", "Election" y "A propósito de Schmidt". "Las historias que más me conmueven son como las de "Entre copas", porque son acerca de seres humanos y de la naturaleza humana, abordan a seres con defectos en momentos ambiguos de sus vidas que no necesariamente llegan a una resolución favorable", explica Payne.

Payne y su colaborador habitual, Jim Taylor, escribieron el guión del film que adapta la novela de Rex Pickett, quien basó libremente el personaje de Miles en él mismo y el de Jack en un amigo con el que emprendió un viaje similar al que narra, aunque no tan accidentado. Payne leyó esta historia en 1999 y se sintió inmediatamente atraído por la humanidad de la misma, su mirada sobre la vida moderna y por el marco de las vinaterías, todo un imán para un amante del vino como Payne.

Cuando inició este proyecto, tras el suceso de "A propósito de Schmidt", Payne fue tentado por numerosas estrellas de Hollywood como George Clooney o Brad Pitt para protagonizar su nueva película. Pero Payne basa su cine en seres reales y actores que puedan convertirse en estos, cosa que no considera que pueda lograrse con celebridades bellas y exitosas. Prueba de ello es el cuarteto que protagoniza esta historia: el indie Paul Giamatti ("Esplendor americano"), el casi retirado Thomas Haden Church (visto en la sitcom "Ned & Stacy"), la prácticamente olvidada Virginia Madsen (una de las actrices más sexys de los años 80) y la poco conocida Sandra Oh (mujer de Payne en la vida real y secundaria en "Bajo el sol de la toscana").

Entre copa y copa, se van desgranando las vivencias de estos personajes -cuyas personalidades encuentran un paralelismo en las distintas clases de vinos-, reflejando la cotidianidad, miserias, frustraciones, esperanzas y sueños de seres humanos ordinarios; una naturalidad que Payne defiende con ahínco en una industria tan artificial. "Quizás demasiadas películas en nuestra época actual han desdeñado a la humanidad por lo superficial. Estoy interesado en revitalizar el cine estadounidense de los años 70, con su énfasis en gente verdadera y problemas verdaderos. Creo que necesitamos desesperadamente películas humanísticas en la actualidad".