El divorcio Cruise-Kidman afectó al pre-estreno de "Los otros"
- por © Corresponsal-NOTICINE.com
3-VIII-01
La "première mundial", en la tarde de este jueves, de la nueva película de Alejandro Amenábar, "Los otros" no estuvo apenas rodeada del glamour esperado. Tampoco del morbo que significaba una posible primera aparición pública juntos de su productor, Tom Cruise, y su protagonista, Nicole Kidman, desde su separación matrimonial. Tom, simplemente, no acudió. Así, fueron el cineasta hispano-chileno y Kidman los únicos astros de la velada en el Paris Theater neoyorquino, ya que tampoco estuvieron presentes otros invitados estelares.
Cruise, mientras, prefirió mantenerse a prudencial distancia, en un momento clave de su litigio legal con la actriz nacida en Hawai. El mismo día del pre-estreno de "Los otros", el diario New York Post perfilaba la estrategia del actor. Su objetivo en el divorcio, que quedará sellado el próximo día 8, justo al día siguiente de que el film de Amenábar llegué a más de 2000 salas norteamericanas, es conceder a su ex mujer sólo la tercera parte de su patrimonio.
Esto significa alrededor de 110 millones de dólares. Por contra, Kidman reclama la mitad de los 335 millones que teoricamente posee el actor. Hablamos de dinero contante y sonante, porque la pareja era propietaria de tres lujosas residencias: una mansión en Los Angeles, valorada en 8 millones de dólares; una casa en Londres, de 5 millones, y una tercera propiedad en Sydney, que ha seguido siendo utilizada en los últimos meses por la actriz, tasada en 4 millones.
Los jueces no pondrán ningún obstáculo para el divorcio, que se oficializará el día 8, pero posteriormente tendrán que quedar claros el reparto del dinero, las casas y la custodia de los hijos adoptados de la pareja. Para ello, ambas partes deberán reunirse el 4 de octubre ante el juez.
La clave que decidirá si Nicole o Tom se salen con la suya es la fecha exacta en la que se produjo su ruptura. La justicia californiana tiene por costumbre repartir todo al 50 por ciento cuando un matrimonio supera su década de existencia. Por eso, Cruise asegura que la relación se terminó en diciembre, mientras que Kidman dice que su entonces marido no abandonó el domicilio conyugal hasta febrero, o sea diez años y un mes después de su boda. Su as en el manga es el embarazo que ella gestaba (frustrado por un aborto en marzo). La actriz afirma que la criatura era de Tom y que quedó encinta en enero.
Para terminar, los niños son otro motivo de discordia. Nicole quiere que crezcan junto a ella en Australia, lejos del ajetreo de Hollywood, pero Cruise prefiere tenerlos más cerca para no pasar tanto tiempo sin verles. Las negociaciones entre ambas partes, si es que no llegan a un acuerdo previo, se mantendrán ante el tribunal durante una semana.
La "première mundial", en la tarde de este jueves, de la nueva película de Alejandro Amenábar, "Los otros" no estuvo apenas rodeada del glamour esperado. Tampoco del morbo que significaba una posible primera aparición pública juntos de su productor, Tom Cruise, y su protagonista, Nicole Kidman, desde su separación matrimonial. Tom, simplemente, no acudió. Así, fueron el cineasta hispano-chileno y Kidman los únicos astros de la velada en el Paris Theater neoyorquino, ya que tampoco estuvieron presentes otros invitados estelares.
Cruise, mientras, prefirió mantenerse a prudencial distancia, en un momento clave de su litigio legal con la actriz nacida en Hawai. El mismo día del pre-estreno de "Los otros", el diario New York Post perfilaba la estrategia del actor. Su objetivo en el divorcio, que quedará sellado el próximo día 8, justo al día siguiente de que el film de Amenábar llegué a más de 2000 salas norteamericanas, es conceder a su ex mujer sólo la tercera parte de su patrimonio.
Esto significa alrededor de 110 millones de dólares. Por contra, Kidman reclama la mitad de los 335 millones que teoricamente posee el actor. Hablamos de dinero contante y sonante, porque la pareja era propietaria de tres lujosas residencias: una mansión en Los Angeles, valorada en 8 millones de dólares; una casa en Londres, de 5 millones, y una tercera propiedad en Sydney, que ha seguido siendo utilizada en los últimos meses por la actriz, tasada en 4 millones.
Los jueces no pondrán ningún obstáculo para el divorcio, que se oficializará el día 8, pero posteriormente tendrán que quedar claros el reparto del dinero, las casas y la custodia de los hijos adoptados de la pareja. Para ello, ambas partes deberán reunirse el 4 de octubre ante el juez.
La clave que decidirá si Nicole o Tom se salen con la suya es la fecha exacta en la que se produjo su ruptura. La justicia californiana tiene por costumbre repartir todo al 50 por ciento cuando un matrimonio supera su década de existencia. Por eso, Cruise asegura que la relación se terminó en diciembre, mientras que Kidman dice que su entonces marido no abandonó el domicilio conyugal hasta febrero, o sea diez años y un mes después de su boda. Su as en el manga es el embarazo que ella gestaba (frustrado por un aborto en marzo). La actriz afirma que la criatura era de Tom y que quedó encinta en enero.
Para terminar, los niños son otro motivo de discordia. Nicole quiere que crezcan junto a ella en Australia, lejos del ajetreo de Hollywood, pero Cruise prefiere tenerlos más cerca para no pasar tanto tiempo sin verles. Las negociaciones entre ambas partes, si es que no llegan a un acuerdo previo, se mantendrán ante el tribunal durante una semana.