Nicole Kidman puede obtener 225 millones de dólares en su divorcio
- por © Redacción-NOTICINE.com
6-VII-01
La ex esposa de Tom Cruise, Nicole Kidman, puede obtener pingües beneficios de su divorcio del actor, cuya fortuna ronda los 450 millones de dólares. La actriz nacida en Hawai y australiana de adopción pretende quedarse con la mitad de esa cantidad, aparte de dos casas que la pareja poseía en Los Angeles y Sydney. Kidman guarda, según la prensa norteamericana, un as en su manga: una prueba de ADN obtenida tras su aborto sucedido en enero, poco después de la separación, y que probaría la paternidad de Cruise. Naturalmente, en los planes de Nicole se incluye la confirmación de la custodia de los dos hijos -ambos adoptados- de la pareja, Isabella, de 8 años, y Connor, de 6.
Hasta ahora, el divorcio "más caro" de Hollywood fue el que protagonizaron Steven Spielberg y la actriz Amy Irving, que se embolsó 110 millones de dólares. Más recientemente, el actor y productor Michael Douglas pagó a su ex esposa Diandra 64 millones.
Cuando Tom Cruise inició los trámites de divorcio, adelantándose a Kidman, pretendía que su fortuna no se moviera del banco, ya que -como es obvio- su ex esposa es una profesional de éxito y bien pagada, que perfectamente puede mantenerse por sí misma. El actor, uno de los más cotizados de Hollywood, alegó ante el juez que su matrimonio se había terminado meses antes de que se produjera la separación. Kidman tendría una prueba palpable de lo contrario.
Y es que la actriz, que muchas veces ha interpretado a mujeres fuertes y perversamente inteligentes, tuvo la idea -digna de su personaje en "Todo por un sueño"- de conservar una prueba de ADN del feto que abortó en enero. Ese hijo, según Cruise, no era suyo, pero la genética podría demostrar lo contrario. Kidman está dispuesta a obtener un divorcio ventajoso, y si no se lo conceden los tribunales norteamericanos, puede acudir a los más propicios australianos, ya que conserva su nacionalidad.
Por su parte, los abogados de Cruise aspiran a un arreglo previo que impida una sentencia. "Esperamos llegar a un acuerdo para el final del verano", ha declarado Dennis M. Wasser, principal letrado del actor y productor, quien añadía que por encima del dinero, lo que le preocupa a su cliente es mantener una custodia compartida de sus hijos: "Tom está luchando por obtener el mayor tiempo posible con los niños". La solución a este culebrón no tendría que tardar...
La ex esposa de Tom Cruise, Nicole Kidman, puede obtener pingües beneficios de su divorcio del actor, cuya fortuna ronda los 450 millones de dólares. La actriz nacida en Hawai y australiana de adopción pretende quedarse con la mitad de esa cantidad, aparte de dos casas que la pareja poseía en Los Angeles y Sydney. Kidman guarda, según la prensa norteamericana, un as en su manga: una prueba de ADN obtenida tras su aborto sucedido en enero, poco después de la separación, y que probaría la paternidad de Cruise. Naturalmente, en los planes de Nicole se incluye la confirmación de la custodia de los dos hijos -ambos adoptados- de la pareja, Isabella, de 8 años, y Connor, de 6.
Hasta ahora, el divorcio "más caro" de Hollywood fue el que protagonizaron Steven Spielberg y la actriz Amy Irving, que se embolsó 110 millones de dólares. Más recientemente, el actor y productor Michael Douglas pagó a su ex esposa Diandra 64 millones.
Cuando Tom Cruise inició los trámites de divorcio, adelantándose a Kidman, pretendía que su fortuna no se moviera del banco, ya que -como es obvio- su ex esposa es una profesional de éxito y bien pagada, que perfectamente puede mantenerse por sí misma. El actor, uno de los más cotizados de Hollywood, alegó ante el juez que su matrimonio se había terminado meses antes de que se produjera la separación. Kidman tendría una prueba palpable de lo contrario.
Y es que la actriz, que muchas veces ha interpretado a mujeres fuertes y perversamente inteligentes, tuvo la idea -digna de su personaje en "Todo por un sueño"- de conservar una prueba de ADN del feto que abortó en enero. Ese hijo, según Cruise, no era suyo, pero la genética podría demostrar lo contrario. Kidman está dispuesta a obtener un divorcio ventajoso, y si no se lo conceden los tribunales norteamericanos, puede acudir a los más propicios australianos, ya que conserva su nacionalidad.
Por su parte, los abogados de Cruise aspiran a un arreglo previo que impida una sentencia. "Esperamos llegar a un acuerdo para el final del verano", ha declarado Dennis M. Wasser, principal letrado del actor y productor, quien añadía que por encima del dinero, lo que le preocupa a su cliente es mantener una custodia compartida de sus hijos: "Tom está luchando por obtener el mayor tiempo posible con los niños". La solución a este culebrón no tendría que tardar...