Notihollywood.com

7-VII-04

Nadie supo que estaba hospitalizado. Su muerte tardó más de 24 horas en conocerse, y su funeral y cremación no pudieron ser más discretos. Se ha sabido que mientras surgían especulaciones sobre el lugar y día del sepelio, ya el pasado fin de semana tuvo lugar una ceremonia privada de adiós a Marlon Brando, a la que sólo asistieron familiares y amigos íntimos.

Uno de ellos, su representante Jay Kanter, contó que ni en los Mares del Sur ni en su ciudad natal de Omaha, sino en la ciudad donde dejó de existir la pasada semana, Los Angeles, fue donde se produjo la cremación y el acto fúnebre. Lo que no quiso o pudo aclarar es qué se hará con las cenizas del asto cinematográfico.

Diversas fuentes afirmaron que el deseo de Brando era que éstas fuesen arrojadas al mar cerca de la isla del Pacífico de la que fue propietario en vida, pero todo parece indicar que el destino de sus cenizas se mantendrá tan secreto como la vida del protagonista de "La ley del silencio" y "El último tango en París" en sus últimos años.

Por otro lado, según Variety, el astro norteamericano había rodado una última película, ya póstuma, antes de fallecer el jueves a los 80 años. Se trata de una producción independiente, "Big bug man", aunque su labor se limitó a doblar la voz de una de los personajes, la señora Sour, y que la cinta se estrenará el año próximo.