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12-IV-04

La política exterior norteamericana también puede ser una buena materia de inspiración para los cineastas. El próximo miércoles, el canal HBO estrenará "Looking for Fidel", segundo de los documentales que Oliver Stone grabó en Cuba junto a su presidente Fidel Castro, considerado "enemigo" por EEUU durante más de 4 décadas, mientras que Columbia ha anunciado la compra de los derechos cinematográficos del libro autobiográfico "Against all enemies: Inside America's war on terror" (Contra todos los enemigos: En el interior de la guerra americana contra el terror), todo un "bestseller" escrito por el ex consejero presidencial en acciones de contraterrorismo, Richard Clarke, para llevarlo al cine.

Los avatares de la actualidad y las ejecuciones que el presidente cubano no evitó el año pasado han privado a los norteamericanos de ver "Comandante", el primero de los documentales que Stone hizo en La Habana, pero a su vez propiciaron este segundo, "Looking for Fidel". De producción española, "Comandante" iba a ser emitida el año pasado por HBO, pero tras pasar por varios festivales y estrenarse comercialmente en salas de España y otros países, la cadena norteamericana pidió a Stone que regresara a La Habana, preguntara a Fidel por las ejecuciones y la oposición (tema no tocado antes), y entrevistara a portavoces de esa disidencia.

Supuestamente, la idea era programar "Comandante" y "Looking for Fidel" como un todo, pero HBO ha decidido finalmente sólo ofrecer a su audiencia la segunda, que algunos consideran "algo más equilibrada" y menos apologética que la primera. Según la agencia norteamericana Associated Press "Comandante" era "una producción de escasa coherencia que colocaba a Stone como centro de atención".

Al presentar el documental ante un grupo de especialistas sobre el tema cubano días pasados, el realizador de "Nacido el 4 de julio", "Asesinos natos" y "Platoon", afirmaba: "Hace un año hubo una gran erupción sobre lo que se llamó represión en Cuba: el arresto, enjuiciamiento y encarcelamiento de unos 75 disidentes y una racha de secuestros que resultó en la ejecución de tres plagiarios y el arresto de muchos más. El mundo condenó a Cuba y Castro por estas acciones mientras Cuba se defendía firmemente. HBO me pidió que regresara a La Habana para intentar platicar con Castro de nuevo y para averiguar qué había ocurrido y por qué. Lo hice y él me otorgó otras 30 horas en tres días que resultó en esta película. También entrevisté a disidentes que no habían sido arrestados, esposas de disidentes encarcelados, secuestradores, para poder presentar un panorama lo más completo posible. No soy periodista, pero entiendo que mis entrevistas con Castro, la de mayo pasado y la anterior, son las únicas que ha dado frente a las cámaras desde la represión, y son las únicas veces que ha tenido oportunidad de defender sus acciones. Espero que esta película ayude a iluminar en cierto grado la situación en Cuba".

De momento lo que no parece es que haya significativas o sorprendentes declaraciones del presidente cubano en el documental, a pesar de que Stone dijo en mayo del año pasado, durante su estancia en Cannes poco después de grabar en Cuba por segunda vez, que el líder caribeño le hizo grandes revelaciones: "Es un documento increíble sobre un hombre de 70 años, que tras seis presidentes norteamericanos está seriamente amenazado por el séptimo, quien hace pesar sobre él la más grande amenaza de su vida, quizá más todavía que la crisis de los misiles en 1962", aseguró.

Recientemente, el director norteamericano perdió la demanda judicial ante los tribunales españoles contra la productora de "Comandante" y la distribuidora de su edición en DVD, por incluir fragmentos inéditos en sus "extras" sin su previa autorización. El tribunal reconoció el derecho de MediaPro y Manga Films a usar todo lo grabado por Stone, según el contrato previo entre las partes.

Por otro lado, Sony Pictures ha adquirido los derechos de la obra autobiográfica de Richard Clarke, en la que el especialista de la Casa Blanca en la lucha contra el terrorismo cuenta sus experiencias en el poder y denuncia los errores cometidos por la Administración Bush. John Calley, ex presidente del mismo estudio, será el encargado de supervisar la producción, para la que aún no se ha elegido realizador, actores y ni siquiera guionista. Las teorías de Clarke sobre el desinterés del actual presidente por las amenazas terroristas antes del 11-S se han considerado claves en la pérdida de popularidad de Bush.