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4-III-04

Los astros de la gran pantalla son muchas veces materia o víctimas de cierta prensa poco rigurosa en cuanto a la veracidad de sus informaciones, sobre todo en determinados países, tan proclives a utilizar como fuentes a "anónimos amigos" de los interesados, capaces de soltar cualquier barbaridad, por no citar a algunas personas que se cruzan con esos famosos y esperan ganar dinero y fama a partir de sus experiencias más o menos reales. Lo cierto es que el actor Christian Slater, un poco harto de leer cosas sobre su amigo Ben Affleck y él mismo, ha decidido defenderse con su propia arma... el cine.

Según la web de chismes The Scoop, Slater está escribiendo un guión en torno a la juerga nocturna que el colega Ben y él mismo protagonizaron en un club de "stripers" canadiense el pasado verano, la cual -amplificada por algunos medios- se dice influyó poderosamente en la crisis de pareja entre Affleck y su entonces prometida, la artista latina Jennifer López.

Los hechos sucedieron en el Club Brandi's de Vancouver, el pasado julio, y el National Enquirer, usando como fuente a la encargada del local, habló de una especie de orgía en la que ambos actores habrían participado en dependencias privadas del establecimiento, cuando Affleck era aún novio de J.Lo. Al mes siguiente, una de las chicas aludidas por los reportajes, Antonella Santini, más conocida por el nombre artístico de "Felicia", se querelló contra la revista y su jefa, asegurando que los periodistas habían pagado 100.000 dólares a la supuesta testigo y que ella se había limitado a bailar, sin tener ninguna relación sexual con los actores.

Christian Slater ha declarado al Vancouver Sun: "Todo este asunto es el tipo de inspiración que le ayuda a uno a ser creativo y empezar a desarrollar una historia sobre ello, porque es ante todo gracioso, disparatado. Sería algo sobre ciertos medios informativos y sus esquemas para manipular la realidad. Creo que sería interesante, además de divertido". El guionista Elan Mastai ha confirmado por su parte que Slater trabaja a partir de la experiencia de actor durante años, "viviendo en medio del huracán de la celebridad. Se trata de una historia sobre tres grupos de personas: unos delincuentes, gente de cine, y reporteros de tabloides".

Hasta el momento, el protagonista de "Broken arrow", "Entrevista con el vampiro" y "Amor a quemarropa" no había escrito ningún guión, y su experiencia fuera de la actuación se limitaba a ser productor ejecutivo de algunas de sus cintas y haber dirigido un corto, con guión ajeno.