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23-I-04

Dos figuras destacadas del cine norteamericano, la actriz Jane Fonda y el realizador James Cameron, han anunciado casi simultáneamente su regreso a un set de rodaje, tras años dedicados a otras actividades. Jane Fonda ha aceptado un papel secundario en la próxima cinta de Jennifer López, "Monster-in-law", que pone punto final a 14 años de retiro como consecuencia de su matrimonio con el magnate de la comunicación Ted Turner. Por su parte, James Cameron, el autor del record de taquilla "Titanic", dedicado en los últimos seis años a hacer documentales marinos, va a filmar una nueva superproducción de ciencia-ficción, en la que usará camaras de alta definición y 3-D.

Militante antibélica e izquierdista más o menos reciclada, símbolo erótico en películas como "Barbarella" o "Klute", y actriz dramática en "Danzad, danzad, malditos", "Julia" y "El regreso", la hija del llorado actor Henry Fonda dejó la actuación tras protagonizar en 1990, junto a Robert de Niro, "Cartas a Iris" ("Stanley & Iris"). Contrajo matrimonio con el fundador de la CNN Ted Turner, y parece que a petición de éste no volvió a ponerse ante una cámara. Ahora, a los 66 años, la protagonista de "El síndrome de China", ya divorciada, quiere retomar una carrera que le hizo acreedora a dos Oscars y cinco candidaturas más.

El papel que le espera en "Monster-in-law" no brilla precisamente por su dulzura. De hecho, Fonda será la "monster" del título, interpretando a la insufrible futura suegra de J.Lo, y principal obstáculo para la boda con el amor de su vida. Robert Luketic dirigirá esta comedia más o menos romántica.

Por su parte, Cameron, parece que va a volver a un género en el que brilló en títulos como "Aliens", "Terminator" o "The abbys", la ciencia-ficción. Y empleamos ese término dudoso dado el volumen de informaciones y rumores que desde que hizo "Titanic", hace seis años, se han generado en torno al temperamental cineasta, que desde su taquillazo se ha dedicado a dirigir documentales submarinos.

Cuando el pasado verano se dijo que la historia elegida por Cameron para su regreso sería la de amor con trágico final entre el submarinista cubano "Pipín" Ferreras y la bióloga francesa Audrey Mestre, campeones mundiales de inmersión sin oxigeno, ya se comentaba que el cineasta no podría escribir personalmente el guión, ya que estaba enfrascado en otro, del que sólo se sabía que sería rodado en 3-D y alta definición.

Ahora, se dice que esta "cinta de ciencia ficción y alto presupuesto con un montón de efectos especiales", según él mismo ha definido, ya está en marcha como proyecto en la 20th Century Fox. El anuncio lo hizo Cameron esta misma semana, en una rueda de prensa coincidiendo con un reestreno de "Terminator 2" en Los Angeles. Añadía el realizador que ha sido ver la trilogía de "El señor de los anillos" y constatar las posibilidades de los nuevos efectos visuales por ordenador lo que le ha movido a desear crear nuevas imágenes "que antes no eran posibles". Aunque no quiso detallar de qué irá la película, sí dijo que usará cámaras perfeccionadas de video digital en alta definición y relieve, como las que empezó a desarrollar para su film documental en 3-D Imax "Fantasmas del abismo".