Bill Plympton, homenajeado en Gijón : "Disney es una orquesta sinfónica y yo como un grupo de punk"
- por © José A. Vélez (Gijón)-NOTICINE.com
El veterano animador Bill Plympton, verso libre en un género dominado por los dibujos animados infantiles informatizados de los grandes estudios, ha dejado su huella en el Festival Internacional de Cine de Gijón. Se le ha entregado el premio honorífico a toda una carrera dedicada a plasmar dibujos en papel con su bolígrafo y sus lápices de colores, para posteriormente animarlos creando cortometrajes y largometrajes trufados de un atrevido humor negro, que incluso le han llevado a ser nominado en dos ocasiones al Oscar, una de ellas por su cortometraje "Your face".
Su pasión por el dibujo nació cuando era pequeño viendo una película por televisión "El dragón hechizado", que enseñaba la parte de atrás de la animación, y en ella podía verse a los dibujantes trabajando en sus mesas. En ese momento supo que quería dedicarse a esto.
En el ámbito del festival también se ha presentado un ciclo con sus películas más relevantes donde podemos encontrar "Cheatin’", "Idiots and Angels", "Hair High", "Mutant Aliens", "I Married a Strange Person", "The Tune", o "Guns of the Clackamas". El director del festival, Nacho Carballo, le define como un dibujo animado andante que pasea por Gijón, y alaba su trabajo como artista independiente, mientras le sonríe el artista, impecablemente vestido con chaqueta blanca y pantalón bermudas, más propios de un festival caribeño que del asturiano fresco y pasado por agua.
Su trabajo es muy valorado en Francia y en España y cree que se debe a que estamos más acostumbrados al surrealismo que en EEUU por la influencia de pintores como Dalí, Picasso o Goya. Piensa Plympton que el mercado estadounidense está dominado por Disney, y aunque le gusta el trabajo que hace, piensa que ejercen tanto poder allí, que es difícil que entren ideas innovadoras. El cineasta se siente orgulloso de poder vivir de su trabajo: "La mayoría de mis cortos salen rentables, me generan ingresos, son bastante populares y hoy en día incluso hasta con los largos saco beneficios, así que ya no necesito hacer tantos anuncios como hacía antes".
Insiste en que recibe ofertas para hacer publicidad, pero está muy ocupado con sus proyectos, para él siempre es más importante el arte que el dinero. Para su última película "Cheatin’" ha recurrido al micromecenazgo, buscando recursos en internet. Le ayudaron sus amigos, "gente como Matt Groening (el "padre" de "Los Simpsons") o Patton Oswalt, que es un cómico bastante conocido en EEUU. Los dos tuitearon acerca de la campaña, también tuiteó al respecto el actor (colombiano) John Leguízamo". Le gusta el sistema de micro mecenazgo porque permite buscar financiación sin recurrir ni a los grandes estudios de Hollywood, ni a las subvenciones del Estado, ni al patrocinio de las grandes empresas. Ha usado este tipo de financiación porque los estudios suelen rechazar sus proyectos: "Me ocurre lo mismo que le ocurre a Terry Gilliam, que tengo bastantes dificultades para poder venderle un proyecto mío, propio y personal, a los grandes estudios de Hollywood".
En cuanto a la animación que se está proyectando en el festival, dice que le encanta, porque se están proyectando películas de gente que las ha hecho sola en su casa sin necesidad de recurrir a los estudios, además cree que es el futuro y afirma que estamos entrando en una nueva era para la animación. Sus proyectos se salen del canon establecido por empresas como Disney que realizan 24 dibujos por segundo, prefiere ser fiel a su estilo: "No tengo ni tiempo ni dinero para realizar 24 dibujos por segundo, lo que decidí hacer fue hacer un dibujo cada cuatro fotogramas, comparo mi estilo con el de Disney y veo que Disney es una orquesta sinfónica perfectamente afinada y yo soy más como un grupo de punk". Define su estilo como crudo, y cree que es más realista que cualquier otro realizado con ordenador.
En cuanto a su estancia en Gijón cree que está siendo una experiencia increíble: "He podido coincidir con Terry Gilliam y con Richard Lester, que son mis dos cineastas favoritos. Jamás pensé que iba a tener la oportunidad de encontrarme con los dos y encima a la vez. Poder charlar con ellos, comer con ellos, es una experiencia impagable", declara. Añade que Richard Lester es un cineasta que le marcó muchísimo y que es un tipo de lo más influyente en su carrera, lo mismo dijo de Terry Gilliam, al que considera un genio, y por el que también se declara influenciado en sus proyectos.
En el evento también se presentó un libro dedicado a Bill Plympton, realizado por Rocío Ayuso y Raúl García, admiradores del dibujante y animador. Los autores explicaron que es una persona muy cercana y que era necesario editar un libro en España sobre él, porque no había ninguno. Contaron un anécdota de cómo Bill rechazó un contrato millonario para la Disney, que le propuso trabajar en "Aladdin", ofreciéndole un millón de dólares. En este aspecto Plymptom cuenta que "después de uno o dos meses trabajando en Disney, no hubiera conseguido resistirme, y hubiera empezado a dibujar mujeres desnudas, escenas de violencia y me temo que me hubieran echado muy rápidamente". Aunque también recalca que si un gran estudio le hace una buena propuesta, con un guión interesante y con la posibilidad de ser fiel a su estilo, no dudaría en hacerlo.
Alaba las producciones de Pixar sobre todo por el trabajo de sus guionistas, pero no se siente identificado con sus técnicas: "Lo que no me acaba de convencer tanto es su forma de trabajar, porque las películas de Pixar están hechas por ordenador, y a mí lo que me gusta de la animación es poder ver los errores, esas pequeñas taras que surgen de hacer le dibujo, me gusta notar la mano del artista en el dibujo que estoy viendo y eso con el ordenador no ocurre. Las películas de animación por ordenador están hechas por máquinas. Además los ordenadores que se usan tienen un presupuesto desorbitado, son películas carísimas, creo que esas computadoras cuestan como unos 200 millones de dólares. El presupuesto que tienen para su película es de 200 millones y yo eso, no me lo puedo permitir. Los míos suelen ser de unos 200 000 dólares. Imaginaos la cantidad de películas que podría hacer yo con un presupuesto como el de Pixar...".
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Su pasión por el dibujo nació cuando era pequeño viendo una película por televisión "El dragón hechizado", que enseñaba la parte de atrás de la animación, y en ella podía verse a los dibujantes trabajando en sus mesas. En ese momento supo que quería dedicarse a esto.
En el ámbito del festival también se ha presentado un ciclo con sus películas más relevantes donde podemos encontrar "Cheatin’", "Idiots and Angels", "Hair High", "Mutant Aliens", "I Married a Strange Person", "The Tune", o "Guns of the Clackamas". El director del festival, Nacho Carballo, le define como un dibujo animado andante que pasea por Gijón, y alaba su trabajo como artista independiente, mientras le sonríe el artista, impecablemente vestido con chaqueta blanca y pantalón bermudas, más propios de un festival caribeño que del asturiano fresco y pasado por agua.
Su trabajo es muy valorado en Francia y en España y cree que se debe a que estamos más acostumbrados al surrealismo que en EEUU por la influencia de pintores como Dalí, Picasso o Goya. Piensa Plympton que el mercado estadounidense está dominado por Disney, y aunque le gusta el trabajo que hace, piensa que ejercen tanto poder allí, que es difícil que entren ideas innovadoras. El cineasta se siente orgulloso de poder vivir de su trabajo: "La mayoría de mis cortos salen rentables, me generan ingresos, son bastante populares y hoy en día incluso hasta con los largos saco beneficios, así que ya no necesito hacer tantos anuncios como hacía antes".
Insiste en que recibe ofertas para hacer publicidad, pero está muy ocupado con sus proyectos, para él siempre es más importante el arte que el dinero. Para su última película "Cheatin’" ha recurrido al micromecenazgo, buscando recursos en internet. Le ayudaron sus amigos, "gente como Matt Groening (el "padre" de "Los Simpsons") o Patton Oswalt, que es un cómico bastante conocido en EEUU. Los dos tuitearon acerca de la campaña, también tuiteó al respecto el actor (colombiano) John Leguízamo". Le gusta el sistema de micro mecenazgo porque permite buscar financiación sin recurrir ni a los grandes estudios de Hollywood, ni a las subvenciones del Estado, ni al patrocinio de las grandes empresas. Ha usado este tipo de financiación porque los estudios suelen rechazar sus proyectos: "Me ocurre lo mismo que le ocurre a Terry Gilliam, que tengo bastantes dificultades para poder venderle un proyecto mío, propio y personal, a los grandes estudios de Hollywood".
En cuanto a la animación que se está proyectando en el festival, dice que le encanta, porque se están proyectando películas de gente que las ha hecho sola en su casa sin necesidad de recurrir a los estudios, además cree que es el futuro y afirma que estamos entrando en una nueva era para la animación. Sus proyectos se salen del canon establecido por empresas como Disney que realizan 24 dibujos por segundo, prefiere ser fiel a su estilo: "No tengo ni tiempo ni dinero para realizar 24 dibujos por segundo, lo que decidí hacer fue hacer un dibujo cada cuatro fotogramas, comparo mi estilo con el de Disney y veo que Disney es una orquesta sinfónica perfectamente afinada y yo soy más como un grupo de punk". Define su estilo como crudo, y cree que es más realista que cualquier otro realizado con ordenador.
En cuanto a su estancia en Gijón cree que está siendo una experiencia increíble: "He podido coincidir con Terry Gilliam y con Richard Lester, que son mis dos cineastas favoritos. Jamás pensé que iba a tener la oportunidad de encontrarme con los dos y encima a la vez. Poder charlar con ellos, comer con ellos, es una experiencia impagable", declara. Añade que Richard Lester es un cineasta que le marcó muchísimo y que es un tipo de lo más influyente en su carrera, lo mismo dijo de Terry Gilliam, al que considera un genio, y por el que también se declara influenciado en sus proyectos.
En el evento también se presentó un libro dedicado a Bill Plympton, realizado por Rocío Ayuso y Raúl García, admiradores del dibujante y animador. Los autores explicaron que es una persona muy cercana y que era necesario editar un libro en España sobre él, porque no había ninguno. Contaron un anécdota de cómo Bill rechazó un contrato millonario para la Disney, que le propuso trabajar en "Aladdin", ofreciéndole un millón de dólares. En este aspecto Plymptom cuenta que "después de uno o dos meses trabajando en Disney, no hubiera conseguido resistirme, y hubiera empezado a dibujar mujeres desnudas, escenas de violencia y me temo que me hubieran echado muy rápidamente". Aunque también recalca que si un gran estudio le hace una buena propuesta, con un guión interesante y con la posibilidad de ser fiel a su estilo, no dudaría en hacerlo.
Alaba las producciones de Pixar sobre todo por el trabajo de sus guionistas, pero no se siente identificado con sus técnicas: "Lo que no me acaba de convencer tanto es su forma de trabajar, porque las películas de Pixar están hechas por ordenador, y a mí lo que me gusta de la animación es poder ver los errores, esas pequeñas taras que surgen de hacer le dibujo, me gusta notar la mano del artista en el dibujo que estoy viendo y eso con el ordenador no ocurre. Las películas de animación por ordenador están hechas por máquinas. Además los ordenadores que se usan tienen un presupuesto desorbitado, son películas carísimas, creo que esas computadoras cuestan como unos 200 millones de dólares. El presupuesto que tienen para su película es de 200 millones y yo eso, no me lo puedo permitir. Los míos suelen ser de unos 200 000 dólares. Imaginaos la cantidad de películas que podría hacer yo con un presupuesto como el de Pixar...".
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