Colaboración: En recuerdo de Sidney Lumet, cronista de la América real
- por © NOTICINE.com
Por Cristina Fernández Fimia
Tal día como hoy llegó a esta tierra nuestra uno de los grandes, el realizador Sidney Lumet. Uno de esos directores que han marcado la historia del cine, no por sus premios o condecoraciones, sino por la realización de un cine de calidad. Uno de esos pocos personajes, que lejos de inundar nuestro planeta, se convierten en especímenes extraños, en seres casi de otra galaxia, capaces de cautivar por sus grandes creaciones a lo largo de toda una carrera.
Aquel 24 de junio de 1924 nació Sidney Lumet, director, productor y guionista recordado por largometrajes como "12 hombres sin piedad / 12 hombres en pugna", "Serpico", "Network", "Larga jornada hacia la noche" o "Asesinato en el Orient Express / Muerte en el expreso de Oriente". Como todo genio, vivió altibajos en su extensa carrera cinematográfica, cuyo comienzo supuso todo un triunfo: éxito comercial, apoyo por parte de los críticos y reconocimiento a nivel mundial, hasta su fallecimiento un 9 de abril de 2011.
Si algo podemos decir de Lumet, es que se atrevía a realizar oscuros retratos de la sociedad y la vida estadounidenses. Sesenta años de trabajo dedicados a enseñar al espectador los aspectos, podríamos decir, menos afables del país que le vio nacer. Autor de más de setenta títulos, teniendo en cuenta también su labor en televisión, mostró al mundo ciertos aspectos crudos siempre desde una perspectiva muy personal.
¿Cómo olvidar ese mítico discurso de Howard Beale en "Network"? Una feroz crítica sobre la manipulación de la información y el enorme poder ostentado por las grandes empresas que aún hoy nos viene "al dedillo". Se atrevió así a lanzar una mirada desafiante al mundo que le tocó vivir, dejando siempre clara su postura ante el cine, que entendía como un análisis de aquello que le rodeaba.
Otra de sus grandes proezas, "Doce hombres sin piedad" lo lanzó a la gran pantalla, desafiando al sistema judicial norteamericano con esta adaptación de la obra original de Reginald Rose. Y hablando de grandes títulos y de crítica, no podía faltar una obra importante: "La noche cae sobre Manhattan / El lado oscuro de la justicia" de la mano del insuperable Andy García, el recientemente fallecido James Gandolfini y de Ian Holm. Gran film policíaco sobre la corrupción, del que muchos hablan como la mejor obra de Lumet en todos los años noventa. Lumet deja claras sus más que visibles cualidades con el género, donde la tensión se convierte en uno de los grandes protagonistas.
Pero con una lista tan extensa de grandiosos títulos, no podríamos detenernos a hablar de todos ellos. Por eso, tampoco deberíamos dejar pasar por alto ese libro que nos regaló: Así se hacen las películas, gracias al cual nos ofreció múltiples conocimientos sobre la labor de un realizador de cine, mostrando los entresijos de sus títulos más conocidos. Consigue hábilmente, publicar un libro interesante para entendidos del mundo cinematográfico y meros lectores abiertos al aprendizaje de este complicado ámbito, combinando sus recuerdos y sabiduría con una serie de aspectos técnicos. Pocas personas podían explicar tan bien cómo resolver ciertos problemas, que aquella que había dedicado su vida entera al cine.
A lo largo de su dilatada carrera, Lumet fue reconocido en diversas ocasiones, desde el Oscar Honorífico (1004) por una destacada carrera profesional, pasando por seis nominaciones más a los Oscar, un Oso de Oro y un prestigio logrado a base de trabajo.
Como escribió en NOTICINE.com nuestro compañero Alberto Duque, sus películas "están marcadas por su interés en denunciar las injusticias de la sociedad, la corrupción de las autoridades, los abusos del poder, las trampas tendidas por los medios de comunicación a los ciudadanos y la lucha inútil de sus personajes por alcanzar una libertad digna, merecida y permanente".
Tal día como hoy llegó a esta tierra nuestra uno de los grandes, el realizador Sidney Lumet. Uno de esos directores que han marcado la historia del cine, no por sus premios o condecoraciones, sino por la realización de un cine de calidad. Uno de esos pocos personajes, que lejos de inundar nuestro planeta, se convierten en especímenes extraños, en seres casi de otra galaxia, capaces de cautivar por sus grandes creaciones a lo largo de toda una carrera.
Aquel 24 de junio de 1924 nació Sidney Lumet, director, productor y guionista recordado por largometrajes como "12 hombres sin piedad / 12 hombres en pugna", "Serpico", "Network", "Larga jornada hacia la noche" o "Asesinato en el Orient Express / Muerte en el expreso de Oriente". Como todo genio, vivió altibajos en su extensa carrera cinematográfica, cuyo comienzo supuso todo un triunfo: éxito comercial, apoyo por parte de los críticos y reconocimiento a nivel mundial, hasta su fallecimiento un 9 de abril de 2011.
Si algo podemos decir de Lumet, es que se atrevía a realizar oscuros retratos de la sociedad y la vida estadounidenses. Sesenta años de trabajo dedicados a enseñar al espectador los aspectos, podríamos decir, menos afables del país que le vio nacer. Autor de más de setenta títulos, teniendo en cuenta también su labor en televisión, mostró al mundo ciertos aspectos crudos siempre desde una perspectiva muy personal.
¿Cómo olvidar ese mítico discurso de Howard Beale en "Network"? Una feroz crítica sobre la manipulación de la información y el enorme poder ostentado por las grandes empresas que aún hoy nos viene "al dedillo". Se atrevió así a lanzar una mirada desafiante al mundo que le tocó vivir, dejando siempre clara su postura ante el cine, que entendía como un análisis de aquello que le rodeaba.
Otra de sus grandes proezas, "Doce hombres sin piedad" lo lanzó a la gran pantalla, desafiando al sistema judicial norteamericano con esta adaptación de la obra original de Reginald Rose. Y hablando de grandes títulos y de crítica, no podía faltar una obra importante: "La noche cae sobre Manhattan / El lado oscuro de la justicia" de la mano del insuperable Andy García, el recientemente fallecido James Gandolfini y de Ian Holm. Gran film policíaco sobre la corrupción, del que muchos hablan como la mejor obra de Lumet en todos los años noventa. Lumet deja claras sus más que visibles cualidades con el género, donde la tensión se convierte en uno de los grandes protagonistas.
Pero con una lista tan extensa de grandiosos títulos, no podríamos detenernos a hablar de todos ellos. Por eso, tampoco deberíamos dejar pasar por alto ese libro que nos regaló: Así se hacen las películas, gracias al cual nos ofreció múltiples conocimientos sobre la labor de un realizador de cine, mostrando los entresijos de sus títulos más conocidos. Consigue hábilmente, publicar un libro interesante para entendidos del mundo cinematográfico y meros lectores abiertos al aprendizaje de este complicado ámbito, combinando sus recuerdos y sabiduría con una serie de aspectos técnicos. Pocas personas podían explicar tan bien cómo resolver ciertos problemas, que aquella que había dedicado su vida entera al cine.
A lo largo de su dilatada carrera, Lumet fue reconocido en diversas ocasiones, desde el Oscar Honorífico (1004) por una destacada carrera profesional, pasando por seis nominaciones más a los Oscar, un Oso de Oro y un prestigio logrado a base de trabajo.
Como escribió en NOTICINE.com nuestro compañero Alberto Duque, sus películas "están marcadas por su interés en denunciar las injusticias de la sociedad, la corrupción de las autoridades, los abusos del poder, las trampas tendidas por los medios de comunicación a los ciudadanos y la lucha inútil de sus personajes por alcanzar una libertad digna, merecida y permanente".