Dos "volúmenes" para la nueva película de Tarantino, "Kill Bill"
- por © Redacción-NOTICINE.com
17-VII-03
Si quiere ver la nueva y esperada película de Quentin Tarantino, "Kill Bill", va a tener que acudir dos veces al cine y pagar dos entradas. De mutuo acuerdo, y a la vista del montaje final de tres horas, el realizador y el todo poderoso amo de Miramax, Harvey Weinstein, decidieron hace tres semanas que esta historia de venganza inspirada por las películas de samurais y protagonizada por Uma Thurman se dividirá en dos entregas, que se estrenarán con unos dos meses de diferencia entre ellas, subtitulándose "Volume I" y "Volume II".
Tal vez los fans del autor de "Pulp fiction" y "Reservoir dogs" hubiesen preferido esa "sobredosis" de sangre, espadas orientales y persecuciones por el mundo (Japón, China, México, Texas y California) durante tres horas, en plan "Lawrence de Arabia" o "Lo que el viento se llevó", pero los distribuidores y exhibidores se frotan ya las manos: dos Tarantinos, más sesiones y más entradas vendidas.
A la vez que este miércoles Miramax anunciaba el cambio estratégico en el lanzamiento de la película, cuyo primer volúmen llegará a los cines norteamericanos el 10 de octubre (aún no decidieron la fecha del estreno del segundo), se daba a conocer que en Asia se estrenarán versiones ligeramente diferentes, más largas, con más escenas de luchas y acción, al estilo de los films locales que inspiraron al realizador, ausente por seis años de nuestras salas, desde que hizo "Jackie Brown".
Según Screen International, la decisión de dividir "Kill Bill" en dos obligará ahora a renegociar los contratos que incluyen porcentajes sobre los beneficios, como los de las protagonistas Uma Thurman y Lucy Liu. El film, cuya filmación y edición ha durado alrededor de un año, habría costado 55 millones de dólares, una cifra más que razonable para los previsibles ingresos que tendrán sus dos partes.
"Kill Bill" es, según su propio director y guionista, aparte de su inspiración oriental "un homenaje a los 'spaghetti westerns', la películas con mujeres peleonas y los 'thrillers' de Charles Bronson". Se sabe de la historia que Thurman interpreta a una asesina a sueldo cuyo jefe elige el día de su boda para quitarla de en medio con un baño de sangre que interrumpe la ceremonia. Tras cinco años en coma, la "novia" despierta con un único objetivo: vengarse de sus ex colegas y del jefe (el tal Bill, interpretado por David Carradine) que ordenó la matanza. El reparto de este "thriller" lo completan Lucy Liu, Daryl Hannah, Michael Madsen, Samuel L. Jackson y Vivica Fox.
Cuando haya terminado la promoción de "Kill Bill", Tarantino volverá al set para hacer su primera "película de guerra", titulada "Inglorious bastards", que tiene por referente títulos como "Doce del patíbulo" o "El desafío de las águilas", y tratará sobre un grupo de delincuentes de uniforme durante la II Guerra Mundial que para evitar el pelotón de fusilamiento se dejan arrastrar a una misión suicida en el frente.
Si quiere ver la nueva y esperada película de Quentin Tarantino, "Kill Bill", va a tener que acudir dos veces al cine y pagar dos entradas. De mutuo acuerdo, y a la vista del montaje final de tres horas, el realizador y el todo poderoso amo de Miramax, Harvey Weinstein, decidieron hace tres semanas que esta historia de venganza inspirada por las películas de samurais y protagonizada por Uma Thurman se dividirá en dos entregas, que se estrenarán con unos dos meses de diferencia entre ellas, subtitulándose "Volume I" y "Volume II".
Tal vez los fans del autor de "Pulp fiction" y "Reservoir dogs" hubiesen preferido esa "sobredosis" de sangre, espadas orientales y persecuciones por el mundo (Japón, China, México, Texas y California) durante tres horas, en plan "Lawrence de Arabia" o "Lo que el viento se llevó", pero los distribuidores y exhibidores se frotan ya las manos: dos Tarantinos, más sesiones y más entradas vendidas.
A la vez que este miércoles Miramax anunciaba el cambio estratégico en el lanzamiento de la película, cuyo primer volúmen llegará a los cines norteamericanos el 10 de octubre (aún no decidieron la fecha del estreno del segundo), se daba a conocer que en Asia se estrenarán versiones ligeramente diferentes, más largas, con más escenas de luchas y acción, al estilo de los films locales que inspiraron al realizador, ausente por seis años de nuestras salas, desde que hizo "Jackie Brown".
Según Screen International, la decisión de dividir "Kill Bill" en dos obligará ahora a renegociar los contratos que incluyen porcentajes sobre los beneficios, como los de las protagonistas Uma Thurman y Lucy Liu. El film, cuya filmación y edición ha durado alrededor de un año, habría costado 55 millones de dólares, una cifra más que razonable para los previsibles ingresos que tendrán sus dos partes.
"Kill Bill" es, según su propio director y guionista, aparte de su inspiración oriental "un homenaje a los 'spaghetti westerns', la películas con mujeres peleonas y los 'thrillers' de Charles Bronson". Se sabe de la historia que Thurman interpreta a una asesina a sueldo cuyo jefe elige el día de su boda para quitarla de en medio con un baño de sangre que interrumpe la ceremonia. Tras cinco años en coma, la "novia" despierta con un único objetivo: vengarse de sus ex colegas y del jefe (el tal Bill, interpretado por David Carradine) que ordenó la matanza. El reparto de este "thriller" lo completan Lucy Liu, Daryl Hannah, Michael Madsen, Samuel L. Jackson y Vivica Fox.
Cuando haya terminado la promoción de "Kill Bill", Tarantino volverá al set para hacer su primera "película de guerra", titulada "Inglorious bastards", que tiene por referente títulos como "Doce del patíbulo" o "El desafío de las águilas", y tratará sobre un grupo de delincuentes de uniforme durante la II Guerra Mundial que para evitar el pelotón de fusilamiento se dejan arrastrar a una misión suicida en el frente.