Colaboración: Nicolas Cage: ¿El nuevo maldito?

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Nicolas Cage, en la comisaría de Nueva Orleans
Nicolas Cage, en la comisaría de Nueva Orleans+
Por Jon Apaolaza

Los idolatramos, les seguimos, vemos sus películas y gastamos nuestro tiempo y dinero en ellos. Pero con la misma facilidad con la que los ponemos en un pedestal, les cortamos la cabeza. Hollywood, que algunos consideran uno de los lugares más liberales de la tierra, se vuelve de vez en cuando tremendamente moralista, y urga bajo las alfombras para encontrar esa mierda que todos tenemos escondida en las nuestras propias.

Ahora le toca el turno a Nicolas Cage. Tras los recientes casos de Lindsay Lohan, Charlie Sheen, Wesley Snipes o Mel Gibson, llegó la hora de condenar al infierno al sobrino de Francis Ford Coppola.

Es sabido que en la Meca del Cine las desgracias no llegan solas. Cage, uno de los actores mejor dotados de su generación cuando cae en buenas manos (algo lamentablemente no tan frecuente), tuvo por errores propios o ajenos problemas con el fisco. Como buen chico blanco no corrió la misma suerte que su colega Snipes y se libró de la cárcel, pero ha debido pagar sus deudas con el tío Sam por la vía de hacer caja lo más rápido posible, fijándose menos en los guiones que caían en sus manos que en los sobres con cheque al portador que les acompañaban.

Para su desgracia, muchos de esos libretos han dado lugar a películas no sólo malas, sino además comercialmente mediocres. "El aprendiz de brujo", una superproducción de Jerry Bruckheimer valorada en 150 millones de dólares, apenas recaudó algo más de 63 en los Estados Unidos. Las inmediatas y más modestas "Temporada de Brujas / En tiempo de brujas" y "Furia ciega / Infierno al volante" han interesado aún menos.

Ahora, cuando tiene hasta cuatro películas pendientes de estreno y otra más que rueda en Nueva Orleans, "Medallion", salta a las portadas con la única foto que los astros temen más que el flash en momento comprometido de un paparazzi, la que les hacen en comisaría. El ganador del Oscar por "Living Las Vegas" ha pasado parte del fin de semana detenido por montar un escándalo en una discusión familiar y encararse con la policía, según la cual Cage estaba pasado de copas cuando lo encontraron en la vía pública golpeando vehículos junto a su esposa Alice Kim, la cual aparentemente no había sido agredida. Ya está en la calle tras pagar una fianza de 11 000 dólares.

No han tardado en surgir testigos que cuentan previas actuaciones -en bares y restaurantes, fuera del plató- más bien etilicamente violentas del actor. Siempre se dan prisa en aparecer los leñadores junto al árbol caído.Tal vez otra consecuencia de la fama... una de armas de destrucción personal más letales que se conocen.

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