La Academia de Hollywood juega a crear tensión ante la gala de los Oscars
- por © Redacción-NOTICINE.com

Las últimas ediciones de la entrega de los premios más famosos del cine mundial, los Oscars, han tenido bajas cuotas de audiencia comparadas con las de las fechas precedentes, y ello implica menos y más barata publicidad durante las pausas de la retransmisión televisiva. La Academia ha optado por una peculiar estrategia para devolver el esplendor de antaño: van a convertir la gala en una película de suspense...
Primero fue su decisión de no dar a conocer en diversas entregas los nombres de los famosos que subirán al escenario, como tradicionalmente se hacía. Dijeron que este año para saberlo habría que conectar el televisor y comprobarlo en directo. No contentos con ello, ahora dan un paso más para captar la atención mediática: "Manténganse alerta" advirtió Sid Ganis, presidente del organismo, dirigiéndose a quien resulte agraciado, en previsión de limitaciones a sus discursos.
Añadió -durante la tradicional comida de candidatos de este lunes- el máximo responsable de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas norteamericana que los productores "van a asumir algunos riesgos, muchos riesgos, algunos temerarios".
Se refería a Laurence Mark y Bill Condon, quienes debutan este 2009 al frente de la organización general de la retransmisión televisiva y la gala. Una de sus ya conocidas novedades será eliminar el tradicional monólogo-balance del año, plagado de ironías y chistes, del maestro de ceremonias (por primera vez el "sexy" actor Hugh Jackman), con el que suele arrancar la ceremonia.
El objetivo sería -según Reuters- "dar más espontaneidad a la gala". Y Ganis insiste en que Condon y Mark tienen algunos trucos en la manga para lograrlo.
El año pasado, la 80 gala de entrega de los Oscars, presentada por el cómico y presentador televisivo Jon Stewart, tuvo la peor marca de audiencia de la historia, 32 millones de espectadores estadounidenses, casi 7 menos que el año precedente. Parece que Academia y ABC, el canal generalista que tiene la exclusiva del evento, se han puesto de acuerdo para crear expectación, al precio que sea...
Primero fue su decisión de no dar a conocer en diversas entregas los nombres de los famosos que subirán al escenario, como tradicionalmente se hacía. Dijeron que este año para saberlo habría que conectar el televisor y comprobarlo en directo. No contentos con ello, ahora dan un paso más para captar la atención mediática: "Manténganse alerta" advirtió Sid Ganis, presidente del organismo, dirigiéndose a quien resulte agraciado, en previsión de limitaciones a sus discursos.
Añadió -durante la tradicional comida de candidatos de este lunes- el máximo responsable de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas norteamericana que los productores "van a asumir algunos riesgos, muchos riesgos, algunos temerarios".
Se refería a Laurence Mark y Bill Condon, quienes debutan este 2009 al frente de la organización general de la retransmisión televisiva y la gala. Una de sus ya conocidas novedades será eliminar el tradicional monólogo-balance del año, plagado de ironías y chistes, del maestro de ceremonias (por primera vez el "sexy" actor Hugh Jackman), con el que suele arrancar la ceremonia.
El objetivo sería -según Reuters- "dar más espontaneidad a la gala". Y Ganis insiste en que Condon y Mark tienen algunos trucos en la manga para lograrlo.
El año pasado, la 80 gala de entrega de los Oscars, presentada por el cómico y presentador televisivo Jon Stewart, tuvo la peor marca de audiencia de la historia, 32 millones de espectadores estadounidenses, casi 7 menos que el año precedente. Parece que Academia y ABC, el canal generalista que tiene la exclusiva del evento, se han puesto de acuerdo para crear expectación, al precio que sea...