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12-VII-02

A pesar de revelarse en sus primeros tiempos con personajes al margen de las normas, independientes y tramposos, como Han Solo, Harrison Ford ha evolucionado hasta encarnar los principios morales de la honestidad y el respeto al poder establecido, incluso ha sido el mismísimo presidente de los EEUU en "Air force one". Galán maduro, hace 4 años elegido por la revista People el actor vivo más "sexy", su recién iniciada sexta década de vida no le impedirá pronto volver a incorporar por cuarta vez a "Indi", uno de sus personajes más emblemáticos y rentables.

Nacido el 13 de julio de 1942 en Chicago, hijo de irlandés y de judía rusa, empezó como actor aficionado mientras estudiaba en el Ripon College de Wisconsin. Se mudó a Los Angeles y empezó a moverse por los estudios, hasta que le dieron una primera oportunidad muy menor en "Dead heat merry-go-round" (1966). Sin embargo, sus comienzos no fueron fáciles, y trabajó más como carpintero o diseñador de decorados que como actor. Tuvo que esperar al 77 para hallar su primera gran oportunidad, "La guerra de las galaxias", después de que el propio George Lucas le dirigiera en "American Graffiti". A pesar de ser aquella una superproducción coral, a la larga ha sido Ford el actor que más ha podido rentabilizar su presencia en el reparto. En su secuela, "El imperio contraataca", Solo alcanza aún mayor portagonismo.

Aparte del aventurero galáctico, al que volvió a dar vida por tercera vez en "El retorno del Jedi", otra trilogía cimentó la fama de Ford, la protagonizada por el doctor arqueólogo Indiana Jones, iniciada con "En busca del arca perdida". La época heróica del actor se completaba con películas como "Blade runner" o "Unico testigo".

El destino parece haberle condenado a las sagas. la última tiene que ver con las aventuras de un agente de la CIA llamado Jack Ryan, al que incorporó en "Juego de patriotas" y "Peligro inminente". Al ser un astro con pocos "pinchazos" en taquilla ("La costa de los mosquitos" fue uno de ellos) y sí muchos taquillazos, al estilo de "El fugitivo", "Sabrina" o "Lo que la verdad esconde", su sueldo ha subido con enorme rapidez en los últimos años.

Harrison Ford, que no ha seguido el ejemplo de un número cada vez mayor de colegas metidos en el terreno de la producción, prefiere medir sus intervenciones en el cine desde su granja, donde vive alejado de Nueva York o Los Angeles. No hace mucho y en varias ocasiones, ha aprovechado para mostrar su heroismo real, rescatando gracias al helicóptero que él mismo pilota a varias personas perdidas en la zona del Parque Nacional de Yellowstone, próximo a su rancho de Wyoming. Hace cerca de un año se separó de su mujer, la guionista Melissa Mathison. Era su segunda esposa, y se habían conocido en 1976, durante el rodaje de "Apocalypse now", cuando el actor estaba casado con su primera mujer, Mary Marquardt, madre de sus dos primeros hijos. Tres años más tarde su matrimonio de 15 años llegó a su fín, pero él y Mathison no se casaron hasta el 83.

Su 60 cumpleaños, este sábado, coincide con las vísperas del estreno de su última cinta, "K-19: The widowmaker", por la que ha cobrado 25 millones de dólares, más un 20% de los beneficios. Pocas veces alguien ha logrado semejantes condiciones laborales en Hollywood. Claro que tampoco es tan normal ser un valor seguro en la taquilla.