Muere a los 72 años el director norteamericano John Frankenheimer
- por © Ursula Albrecht-NOTICINE.com
8-VII-02
John Frankenheimer, director de conocidas películas en los 60 y 70, cómo "El mensajero del miedo", "El hombre de Alcatraz", "The French Connection II" y "Orgullo de estirpe", murió el pasado sábado en Los Angeles a los 72 años de edad. Según su portavoz, el cineasta estadounidense, que llevaba tiempo delicado de salud, por lo que fue sustituído el mes pasado en el proyecto de "precuela" de "El exorcista", falleció en el hospital Cedros del Sinaí tras sufrir complicaciones después de una delicada operación de espalda.
Frankenheimer, perteneciente a la llamada "generación de la TV" (con Sidney Lumet y Arthur Penn), fue candidato en el transcurso de su carrera a 14 Emmys, trabajó con grandes estrellas cómo Ava Gardner, Janet Leigh, Sharon Stone, Burt Lancaster, Kirk Douglas, Marlon Brando, Gregory Peck o Gene Hackman. Estuvo más de 50 años detrás de las cámaras, dirigiendo más de 100 películas, además de ser responsable de más de 150 telefilms. En los últimos años consiguió reverdecer viejos laureles con las cintas de acción "Ronin", con Robert de Niro, y "Operación Reno", con Ben Affleck, que registraron aceptables recaudaciones.
"El dominio de los medios cinematográfico y televisivo convirtieron a Frankenheimer en un director excepcional", afirmó Nancy Lesser, de la cadena de televisión estadounidense HBO, en un comunicado. El cineasta nacido en Malba, estado de Nueva York, el 19 de febrero de 1930, inició su carrera cinematográfica haciendo películas para las Fuerzas Aéreas mientras cumplía el servicio militar, para luego continuar con el medio televisivo, dónde obtuvo cuatro premios Emmy, para finalmente lanzarse al cine.
Antes de rodar "Siete días de mayo" con Burt Lancaster, Kirk Douglas y Ava Gardner, así como "El tren", con Lancaster, Paul Scofield y Jeanne Moreau, el director obtuvo su primer éxito internacional en 1962 con el "thriller" con Frank Sinatra, Laurence Harvey, Janet Leigh y Henry Silva titulado "El mensajero del miedo". Esta película narra la historia de un veterano de la guerra de Corea sometido a un lavado de cerebro mientras estaba prisionero y programado para matar a un político liberal. Esta cinta fué reestrenada en 1988, ya que a principios de los 60 no se mostró debido al asesinato del presidente John F. Kennedy.
El director sufrió un gran decaimiento, cuando su amigo íntimo, el presidente norteamericano de entonces, John F. Kennedy, murió asesinado. El estado físico y mental del cineasta empeoró en 1968 cuando el hermano del presidente asesinado, Robert F. Kennedy, también amigo cercano del cineasta, murió a consecuencia de otro atentado. Frankenheimer se hundió en una gran depresión, que le condujo al alcoholismo.
Antes de su operación, el cineasta había abandonado el proyecto de la "precuela" de "El exorcista", cinta que iba a dirigir, por motivos de salud, que finalmente acabaron con su vida. John Frankenheimer estaba considerado, por críticos e historiadores, como uno de los mejores cineastas norteamericanos de su generación, y uno de los pocos que introdujo elementos políticos en sus películas.
John Frankenheimer, director de conocidas películas en los 60 y 70, cómo "El mensajero del miedo", "El hombre de Alcatraz", "The French Connection II" y "Orgullo de estirpe", murió el pasado sábado en Los Angeles a los 72 años de edad. Según su portavoz, el cineasta estadounidense, que llevaba tiempo delicado de salud, por lo que fue sustituído el mes pasado en el proyecto de "precuela" de "El exorcista", falleció en el hospital Cedros del Sinaí tras sufrir complicaciones después de una delicada operación de espalda.
Frankenheimer, perteneciente a la llamada "generación de la TV" (con Sidney Lumet y Arthur Penn), fue candidato en el transcurso de su carrera a 14 Emmys, trabajó con grandes estrellas cómo Ava Gardner, Janet Leigh, Sharon Stone, Burt Lancaster, Kirk Douglas, Marlon Brando, Gregory Peck o Gene Hackman. Estuvo más de 50 años detrás de las cámaras, dirigiendo más de 100 películas, además de ser responsable de más de 150 telefilms. En los últimos años consiguió reverdecer viejos laureles con las cintas de acción "Ronin", con Robert de Niro, y "Operación Reno", con Ben Affleck, que registraron aceptables recaudaciones.
"El dominio de los medios cinematográfico y televisivo convirtieron a Frankenheimer en un director excepcional", afirmó Nancy Lesser, de la cadena de televisión estadounidense HBO, en un comunicado. El cineasta nacido en Malba, estado de Nueva York, el 19 de febrero de 1930, inició su carrera cinematográfica haciendo películas para las Fuerzas Aéreas mientras cumplía el servicio militar, para luego continuar con el medio televisivo, dónde obtuvo cuatro premios Emmy, para finalmente lanzarse al cine.
Antes de rodar "Siete días de mayo" con Burt Lancaster, Kirk Douglas y Ava Gardner, así como "El tren", con Lancaster, Paul Scofield y Jeanne Moreau, el director obtuvo su primer éxito internacional en 1962 con el "thriller" con Frank Sinatra, Laurence Harvey, Janet Leigh y Henry Silva titulado "El mensajero del miedo". Esta película narra la historia de un veterano de la guerra de Corea sometido a un lavado de cerebro mientras estaba prisionero y programado para matar a un político liberal. Esta cinta fué reestrenada en 1988, ya que a principios de los 60 no se mostró debido al asesinato del presidente John F. Kennedy.
El director sufrió un gran decaimiento, cuando su amigo íntimo, el presidente norteamericano de entonces, John F. Kennedy, murió asesinado. El estado físico y mental del cineasta empeoró en 1968 cuando el hermano del presidente asesinado, Robert F. Kennedy, también amigo cercano del cineasta, murió a consecuencia de otro atentado. Frankenheimer se hundió en una gran depresión, que le condujo al alcoholismo.
Antes de su operación, el cineasta había abandonado el proyecto de la "precuela" de "El exorcista", cinta que iba a dirigir, por motivos de salud, que finalmente acabaron con su vida. John Frankenheimer estaba considerado, por críticos e historiadores, como uno de los mejores cineastas norteamericanos de su generación, y uno de los pocos que introdujo elementos políticos en sus películas.