Notihollywood.com

Por Rolando Gallego    

Con una fuerte impronta humorística, un gran despliegue cinematográfico, y un mensaje que apela a la propagación de consignas feministas desde la pantalla grande, la primera adaptación de las novelas de Nancy Springer, de la que suponemos vendrán muchas más, "Enola Holmes" (2020), dirigida por Harry Bradbeer ("Fleabag"), permite el lucimiento de Millie Bobby Brown, en su primera propuesta alejada del fenómeno "Stranger Things" y de la que también participa como productora, sin salir de la plataforma Netflix.

La principal virtud de una película como esta es poder acercar un mensaje que invita a sus espectadores a luchar por sus sueños, recurrir a su inteligencia, y evitar caer en lugares y profesiones preestablecidas solo por cuestiones de género. Coming of age histórica, al introducir elementos de intriga y misterio, aquello que se vuelve predecible termina por estremecerse cada vez que la protagonista rompe la cuarta pared.

Ese recurso, del que Bradbeer junto con Phoebe Waller-Bridge hicieron una marca, es el que invita, en esta oportunidad, a empatizar y ser cómplice de la joven detective, pero también es el que funda el placer de acompañar a esta señorita de la que rápidamente, gracias a su introducción antes de los títulos, conoceremos todo, o casi todo, sobre su vida.

Rodada en escenarios naturales, y con la mayor parte de las escenas en exteriores, es gracias a su belleza visual, su cuidada fotografía, y la decisión de introducir la comedia como motor narrativo, que la película termina convirtiéndose en mucho más que un mero entretenimiento.

El relato de Enola Holmes es simple, y en esa simpleza se permite dialogar con el paradigma vigente en tanto conquistas y empoderamiento femenino. Desarrollada como una figura sagaz, ácida y sabiendo que lo más preciado es su libertad, Enola (Bobby Brown) es el ejemplo de la unión de buenas ideas para construir un relato apasionante sobre amistad, amor y familia, pero también sobre contradicciones, miedos y la necesidad de acudir al otro para terminar de completarse.

Enola se encontrará, tras años de no tener contacto, con sus dos hermanos (Henry Cavill y Sam Claflin) cuando su madre (Helena Bonham Carter), aquella excéntrica mujer que dedicó su vida a educarla, de la manera menos ortodoxa que se pueda imaginar, de un día para el otro la abandona.

Sherlock (Cavill) y Mycroft (Claflin) en vez de asesorarla y ayudarla, terminarán impulsándola a que ella misma pueda desentrañar el misterio tras la desaparición de su progenitora, sin saberlo, pero intuyendo que en aquello que dice el refrán de "lo que se hereda no se roba", el linaje permitirá a la niña descubrir y descubrirse.

Cambios de identidad, caídas de trenes en movimiento, peleas mortales con asesinos, son sólo algunos de los aditamentos a los que recurrirá esta propuesta, configurando a Enola como uno de los personajes femeninos más potentes y activos de la reciente cinematografía hollywoodense.

Aventura, comedia, romance, drama, en medio de un relato con contexto histórico acorde a la protagonista, una Inglaterra que debía absorber nuevos preceptos en materia de género, fascinada por el crimen, lo policial y los detectives y que disfrazando la progresión dramática de película de intrigas, se devela el costado más fascista y retrógrado de una sociedad pujante que excluía a las mujeres, y que en la necesidad de perpetuar un status quo, donde se llega hasta las últimas consecuencias, el más inofensivo puede ser un asesino letal, incluso, de la protagonista.

Sigue nuestras últimas noticias por TWITTER.