El cómico británico Ricky Gervais se ha salido con la suya y repetirá como presentador de los Globos de Oro, segundos galardones más importantes del audiovisual estadounidense después de los Oscars. Pese a la sesión de humillación a la que sometió este año a invitados, premiados y hasta al mismísimo presidente de la asociación de prensa extranjera que organiza el evento, NBC, el canal que transmite la ceremonia ha presionado para que el actor de "The Office" vuelva a ser el maestro de ceremonias.

Los ácidos chistes de Gervais podrían volver a sonar en el Hotel Beverly Hilton salvo que en el acuerdo privado se haya contemplado cierta moderación de su envenenada lengua. El humorista tenía un contrato firmado con NBC para presentar un año más la gala, pero tras sus excesos del pasado enero, la Asociación de la Prensa Extranjera en Hollywood (HFPA) dijo por activa y pasiva que su presentación había ido "demasiado lejos" y que no consideraban seguir contando con él.

"Mi trabajo no consiste en preocuparme de lo que la gente piensa de mí, eso se lo dejo a los políticos", comentó a la CNN Gervais días despues de la ceremonia. "Me contrataron por mi trabajo, y si no les gustaba, no debieron volver a hacerlo", añadió, refieriéndose a que ya lo había hecho antes en 2010.

Pero el cómico no esperó mucho antes de sostener con total convicción que no hay dos sin tres, y en febrero declaró ya que le habían pedido volver a conducir la gala en 2012. El organismo periodístico no tardaba en responder que todo era pura invención o afán de protagonismo de Gervais, y que nunca existió tal petición.

"El rumor no es cierto. No le hemos pedido que vuelva. Buen intento, Ricky...", decía en un comunicado Philip Berk, presidente de la HFPA, a quien el humorista había ridiculizado con un chiste sobre su edad unas semanas antes. A lo que el actor se aprestó en responder matizando que sus palabras no se referían a una oferta de la entidad, sino de un directivo de la cadena NBC, que estaba feliz tras conocerse que la última gala de los Globos, que él presentó, fue la de mejor audiencia televisiva de los últimos años.

Y al final parece que en efecto lo que ha mandado son los índices de audiencia y el millonario pago de la NBC por emitir la ceremonia, que es el que en gran medida sostiene los presupuestos de la HFPA. Ellos quieren a Gervais porque les garantiza el interés del público. Deadline dice que recientemente el actor, guionista y productor cenó en París con representante del canal y de la asociación, y que esa reunión limó asperezas y favoreció este anuncio del miércoles.

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