El actor Eddie Murphy, propuesto como maestro de ceremonias a la Academia por el realizador Brett Ratner, productor hasta este martes de la próxima gala de entrega de los premios Oscar, ha renunciado al puesto pocas horas después de que su amigo dimitiera como consecuencia de las críticas negativas recibidas por sus bromas y declaraciones interpretadas por algunos como machistas y homófobas.

En una declaración del astro afroamericano, afirma: "En primer lugar quiero decir que entiendo y apoyo completamente la decisión de cada parte con respecto al cambio de los productores de la ceremonia de premiación de la Academia de este año. Yo estaba esperando ansiosamente ser parte del espectáculo que nuestro equipo de producción y escritores estaban empezando a desarrollar, pero estoy seguro de que el nuevo equipo de producción y el maestro de ceremonias que ellos deberán nombrar harán igualmente un gran trabajo".

El presidente de la Academia, Tom Sherak, quien el pasado septiembre aceptó la sugerencia de Brett Ratner, quien le acababa de dirigir en la comedia de acción "Un golpe de altura" ("Tower heist"), de nombrar a Eddie Murphy principal conductor de la gala, dio a conocer la retirada del actor, diciendo que "aprecio como Eddie se siente tras perder a su colaborador creativo, Brett Ratner, y todos le deseamos lo mejor".

Ahora, la Academia se enfrenta con urgencia a la necesidad de renovar todo el equipo de producción de la próxima gala, que está anunciada para el 26 de febrero, como en los últimos años en el Kodak Theatre, y deberá hacerlo lo antes posible para ajustarse a los plazos y programas previstos.

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