Imprimir

Reportaje: Hollywood está verde

por © NOTICINE.com
'2012', desastres por el calentamiento global
'2012', desastres por el calentamiento global

Por Alberto Duque López

No es simple casualidad que tres de los más esperados estrenos de estas semanas se relacionen con la preocupación de Hollywood y la obsesión de directores, actores y guionistas con la Naturaleza, sus peligros, sus depredadores y, lo que es peor, su oscuro futuro.

El uno, “The Cove” del director Louis Psihoyos, ganador de los premios del público en los últimos festivales de Toronto y Sundance, está llamado a provocar uno de los grandes escándalos del año porque sus camarógrafos lograron penetrar los sigilosos, poderosos y peligrosos círculos de los cazadores y asesinos de delfines en mares japoneses (especialmente Taiji, cerca de Osaka) y filmar, muchas veces de noche y camuflados como comandos las escenas más sangrientas y atroces que muestran cómo los animales son cazados, especialmente los más pequeños, troceados y empacados para consumo humano, cuando todos en Japón saben que esa carne contiene una alta dosis de mercurio porque viven en aguas contaminadas desde hace muchos años.

La caza de delfines está supuestamente prohibida en el Japón (se calcula que al año más de 25.000 animales son despedazados) pero esta película que fue realizada durante cuatro años, con todos los recursos financieros, humanos y técnicos dignos de cualquier historia de Hollywood, demuestra que hasta la policía colabora con los cazadores porque, en varias oportunidades intentaron impedir la filmación.

La segunda película se llama “2012”, dirigida por Roland Emmerich, especializado en ruidosas películas de desastres (“10.000 AC”, “Día de la Independencia”, “Godzilla” y “Stargarte” entre otras historias en las que ni los camarógrafos se salvan), pero en esta ocasión enfocado en el año en que, según el calendario de los mayas, la tierra, el agua, el aire y el fuego se ponen de acuerdo para acabar con el universo, en medio de las escenas digitales más escalofriantes.

En uno de los momentos más apremiantes, uno de los niños pregunta al padre por  qué la tierra está siendo destruida y el otro responde, resumiendo la esencia de la película: “Porque hicimos todo para merecerlo”.

La tercera y muy esperada película en esta llave de ambientalistas con cineastas, pertenece a uno de los nombres míticos de Hollywood, James Cameron, quien regresa con “Avatar” doce años después de “Titanic”: la historia es premonitoria porque muestra cómo en un futuro cercano los recursos naturales se extinguen y los habitantes de la Tierra tienen que trasladarse a otras galaxias en busca de alimentos. Este viernes, grupos de invitados mirarán 15 minutos escogidos en salas de 3D como una forma de aumentar el misterio y la provocación. En Latinoamérica la funcion será a las 7:00 de la noche. Sin palomitas.

Hollywood, empujado en buena parte por el documental de Al Gore, “Una verdad incómoda” que ganó un Oscar y otros premios importantes, en el que sin alarmismo pero con cifras abundantes comprueba la loca carrera de autodestrucción que sostiene la humanidad, ha respondido con entusiasmo a esta campaña para defender el planeta, y propiciado la realización de festivales en San Francisco, Seattle, Nueva York y otras ciudades de Estados Unidos, dedicados al cine y el medio ambiente, en llave con eventos similares en ciudades del mundo como la italiana Cosenza, en la región de Calabria (donde el turismo está destruyendo las playas, el paisaje y las reservas marinas con sus implacables construcciones), con el nombre de Festival Internazionale Cinema Ambiente & Paesaggio, cada año, en la segunda semana octubre. Películas como “Ghosts” de Nick Broomfield, “Nazareno” de Varo Ventura, “Un Beau Matin” de Charlotte y David Lowe y “You & I” de Kristijonas Vildziunas han provocado intensos debates por sus denuncias ambientales. Igual ocurre con el festival internacional de Cine del Medio Ambiente en Llobregat, Tortosa y Sant Feliu de Guixols, en la costa catalana donde las películas y los invitados analizan las amenazas al medio ambiente.

Durante estos últimos años los espectadores también han sido impactados por películas como “The Happening” del discutido M. Night Shyamalan para quien ha llegado la hora en que la Naturaleza se vengue de todos los desmanes causados por el hombre; “Sunshine” del brillante Danny Boyle (el mismo de “¿Quién quiere ser millonario?”). que cuenta los esfuerzos de un grupo de astronautas y científicos por revivir un sol moribundo al que le queda poco tiempo para apagarse del todo, luego de su corrosiva “Exterminio” en la que unos cuantos mortales se esconden en Londres y sus alrededores de los miles de infectados de un virus que los convierte en depredadores; “The Last Man”, inferior a las anteriores, cuenta con humor negro lo que ocurre a los dos últimos hombres que quedan sobre la Tierra y la mujer que deben compartir.

Antes de finalizar este año, otras películas documentales serán estrenadas: “Call of Life: Facing the Mass Extinction” sobre la amenazante pérdida de la biodiversidad y “11th Tour” producido y narrado por Leonardo DiCaprio sobre la urgente necesidad de reparar y recuperar el erosionado ecosistema.

A propósito de DiCaprio, cada vez son más notables la participación, el interés y la militancia expresa de numerosos actores de Hollywood, cada uno a su manera, en numerosas y exitosas campañas a favor del medio ambiente, no solo con las películas que protagonizan y los actos públicos que encabezan sino con distintas actividades dentro y fuera de Estados Unidos que de una u otra forma inciden en motivar a millones de personas para que luchen por la supervivencia del planeta.

DiCaprio, Cameron Díaz, Patricia Arquette, Daryl Hannah y Larry David, entre otros, promocionan el uso de los automóviles híbridos que se mueven con electricidad y biodiesel, provocando menos contaminación atmosférica.

Hannah ha sido una de las militantes ecológicas más agresivas. Sostiene actualmente una batalla con la petrolera Chevron (antes Texaco), por la contaminación de extensas zonas de bosques y aguas en Ecuador, y hace poco protagonizó una de las protestas más pintorescas en una zona forestal de California, donde una compañía pretendía talar los árboles, arruinar el ecosistema y construir una inmensa urbanización con centros comerciales y anchas avenidas. Hannah se encadenó a uno de los árboles e impidió el trabajo de las máquinas excavadoras. Mientras, ha sido una de las promotoras del ciclo anual  de conferencias “Hollywood Goes Green”, en un hotel de Los Angeles, que busca el compromiso de las figuras de Hollywood con temas ambientales, como la producción de películas en este campo y el aporte a la lucha contra la degradación de la vida.

Madonna, por su parte, auspició la realización de los conciertos benéficos Live Earth y lanzó una canción, “Hey You” en la que habla claro sobre estos problemas ecológicos. Un mismo día, el 7 de julio de 2007  bajo el lema “SOS por un clima en crisis”, millones de personas bailaron y gozaron y hablaron con artistas muy populares en escenarios de Londres, Río, Shanghai, Johannesburgo, Sidney, Tokio, Nueva York, Washington, Kyoto, Hamburgo y la Atlántida. Dicen que es el concierto más grande realizado hasta ahora.

Además de DiCaprio, Daryl Hannah, Madonna y otros hay que destacar la labor de estrellas como Robert Redford (ha comprometido su festival de Sundance); Kevin Costner (pelea por los delfines y las ballenas); Sting (forma parte de varios comités internacionales); Matt Damon (participó de un documental sobre la Tierra y organiza la filmación de otro sobre los océanos amenazados y contaminados); Cameron Díaz (presentó en el canal juvenil MTV una serie de documentales sobre especies en extinción); Steven Seagal (convertido en defensor de las pequeñas y olvidadas comunidades en Estados Unidos y Europa amenazadas por las plantas de desechos tóxicos, muchas de las cuales se han visto obligadas a cerrar sus actividades bajo las presiones del actor); Jane Fonda (forma parte de varios comités que defienden el clima); el grupo Maná aunque no trabaja en Los Angeles tiene contactos con organizaciones de Hollywood sobre todo para defender los lobos marinos, los cocodrilos, las tortugas y sobre todo, los bosques tropicales; el actor Larry David y su esposa Laurie han conseguido a través de su página en Internet, más de 500.000 firmas para enfrentar el calentamiento global; Julia Roberts encabeza una campaña para que numerosas personas cultiven sus propias frutas y verduras, y eviten la proliferación de supermercados y desperdicios; George Clooney aceptó grabar, gratuitamente, numerosos comerciales de televisión con campañas a favor del medio ambiente, y así sucesivamente mientras se calcula que la industria del cine en California, con sus autos, generadores y efectos especiales al aire libre emite al año más de 200.000 toneladas de sustancias nocivas para la atmósfera.

Por supuesto, las recientes películas sobre conflictos ambientales no son las únicas. Están precedidas de algunas memorables como “El síndrome de China” con Jane Fonda, sobre la amenaza de una planta nuclear; “Silkwood” con Cher, sobre el asesinato de una mujer que se atreve a denunciar las pésimas condiciones de trabajo en otra planta nuclear; “Erin Brokovich” con Julia Roberts como la defensora de un pueblo contaminado por una fábrica; “Acción Civil” con John Travolta, con una situación parecida, entre otras.