Murió John Hughes, el rey de la comedia americana de los 80
- por © Redacción-NOTICINE.com

Hacía casi 20 años que John Hugues, cuyo nombre hace menos de tres décadas era sinónimo de la comedia juvenil o infantil pero inteligente, no se ponía tras una cámara, pero siguió ocasionalmente ejerciendo como productor o guionista, hasta hace poco. La suya fue una carrera plena de talento y de rentable imaginación que generó muchos millones de dólares para Hollywood y cuyo punto final el destino ha tecleado este jueves en Nueva York, mientras paseaba.
Hughes estuvo detrás de prolíficos fenómenos tan comerciales como "Solo en casa" o "Beethoven", pero también de títulos que simbolizaron a toda una generación de adolescentes, como "Un experto en diversión / La escapada de Ferris Bueller / Todo en un día", "La chica de rosa" o "El club de los cinco", comedias adolescentes que marcaron a millones de muchachos, en todo el mundo, y que los mostraban alejados de los estereotipos, como seres inteligentes, reales y sensibles.
Hughes, en tanto que director, guionista y productor, fue un elemento único en el Hollywood de las postrimerías del siglo XX, y su pérdida, de un ataque repentino al corazón este jueves, ha consternado a numerosos profesionales del cine, que han manifestado públicamente su desazón por la pérdida prematura de un creador que tenía sólo 59 años.
Gente como Wes Anderson, Kevin Smith o Judd Apatow han asumido haber sido influenciados por Hughes, y el último de ellos, que acaba de estrenar "Funny people", ha enviado a los medios tras conocer la noticia un comunicado en el que asume que "una parte de mi infancia acaba de morir con él. Nadie me hice reir tanto y tan intensamente como John Hughes".
Nacido en 1950, en Lansing (Michigan) pasó buena parte de su vida en esa zona norte de los Estados Unidos. Trabajó como creativo publicitario en Chicago antes de vender chistes y guiones a cómicos establecidos en la industria y convertirse en guionista a principios de los años 80. Su primer libreto cinematográfico se convirtió en película -"Class reunion"- en 1982. Dos años después debutó como realizador con "Dieciséis velas / Se busca novio", protagonizada por Molly Ringwald. "El club de los cinco", con la misma intérprete, Emilio Estévez, Anthony Michael Hall, Judd Nelson y Ally Sheedy.
Aunque su curriculum como guionista y productor es bastante amplio, sólo realizó ocho films, entre los que no estuvo su mayor éxito comercial, la saga "Sólo en casa" (1990), que convirtió a Macaulay Culkin en la estrella infantil mejor pagada de la historia. Con casi 29 años en este momento, el joven actor expresa su dolor este jueves con un comunicado en el que reconocía su admiración por Hughes: "Yo fui su "fan" tanto por su trabajo como por su personalidad. El mundo ha perdido no sólo a un cineasta fundamental cuya influencia será sentida por generaciones, sino también a un hombre grande y decente". En términos muy similares se expresaron otros dos actores que le debían mucho, Matthew Broderick y Molly Ringwald.
En 1991 dirigió su última cinta, "La pequeña pícara" pero siguió produciendo y escribiendo lejos de Hollywood, desde su granja en el norte de Illinois, en los últimos años bajo un pseudónimo tomado de "El conde de Montecristo", de Dumas, Edmond Dantès. Uno de sus más recientes guiones fue para Jennifer López, en "Sueño de amor / Sucedió en Manhattan" y cerró su carrera con el de "No tan duro de pelar / Un guardaespaldas escolar", el año pasado.
Hughes estuvo detrás de prolíficos fenómenos tan comerciales como "Solo en casa" o "Beethoven", pero también de títulos que simbolizaron a toda una generación de adolescentes, como "Un experto en diversión / La escapada de Ferris Bueller / Todo en un día", "La chica de rosa" o "El club de los cinco", comedias adolescentes que marcaron a millones de muchachos, en todo el mundo, y que los mostraban alejados de los estereotipos, como seres inteligentes, reales y sensibles.
Hughes, en tanto que director, guionista y productor, fue un elemento único en el Hollywood de las postrimerías del siglo XX, y su pérdida, de un ataque repentino al corazón este jueves, ha consternado a numerosos profesionales del cine, que han manifestado públicamente su desazón por la pérdida prematura de un creador que tenía sólo 59 años.
Gente como Wes Anderson, Kevin Smith o Judd Apatow han asumido haber sido influenciados por Hughes, y el último de ellos, que acaba de estrenar "Funny people", ha enviado a los medios tras conocer la noticia un comunicado en el que asume que "una parte de mi infancia acaba de morir con él. Nadie me hice reir tanto y tan intensamente como John Hughes".
Nacido en 1950, en Lansing (Michigan) pasó buena parte de su vida en esa zona norte de los Estados Unidos. Trabajó como creativo publicitario en Chicago antes de vender chistes y guiones a cómicos establecidos en la industria y convertirse en guionista a principios de los años 80. Su primer libreto cinematográfico se convirtió en película -"Class reunion"- en 1982. Dos años después debutó como realizador con "Dieciséis velas / Se busca novio", protagonizada por Molly Ringwald. "El club de los cinco", con la misma intérprete, Emilio Estévez, Anthony Michael Hall, Judd Nelson y Ally Sheedy.
Aunque su curriculum como guionista y productor es bastante amplio, sólo realizó ocho films, entre los que no estuvo su mayor éxito comercial, la saga "Sólo en casa" (1990), que convirtió a Macaulay Culkin en la estrella infantil mejor pagada de la historia. Con casi 29 años en este momento, el joven actor expresa su dolor este jueves con un comunicado en el que reconocía su admiración por Hughes: "Yo fui su "fan" tanto por su trabajo como por su personalidad. El mundo ha perdido no sólo a un cineasta fundamental cuya influencia será sentida por generaciones, sino también a un hombre grande y decente". En términos muy similares se expresaron otros dos actores que le debían mucho, Matthew Broderick y Molly Ringwald.
En 1991 dirigió su última cinta, "La pequeña pícara" pero siguió produciendo y escribiendo lejos de Hollywood, desde su granja en el norte de Illinois, en los últimos años bajo un pseudónimo tomado de "El conde de Montecristo", de Dumas, Edmond Dantès. Uno de sus más recientes guiones fue para Jennifer López, en "Sueño de amor / Sucedió en Manhattan" y cerró su carrera con el de "No tan duro de pelar / Un guardaespaldas escolar", el año pasado.