12-XI-01

- Hollywood está dispuesto a sumarse a la voluntad bélica y patriótica de la Administración Bush. Este domingo representantes de la industria audiovisual norteamericana y de la Casa Blanca llegaron a un acuerdo de colaboración, en términos un tanto abstractos, que pueden tener un posterior desarrollo. Hollywood (incluída la industria televisiva) tendrá que promocionar ideas como que la lucha norteamericana no es contra el Islam, sino contra los terroristas; que hay que apoyar al ejército y a las familias de los soldados; que el ataque del 11 de septiembre fue no sólo contra EEUU, sino contra todo el mundo y la reacción es también internacional; y que pueden necesitarse voluntarios para servicios civiles en todo el país. La industria del entretenimiento tendrá que dar seguridad a los niños sin caer en la propaganda. Sin embargo, el presidente de la patronal MPAA, que reune a los principales estudios, Jack Valenti, desmintió que la Administración quiera imponer determinados contenidos.

- Renée Zellweger ha dado puerta a George Clooney, según diversos medios. El motivo no sorprende en absoluto, y tiene que ver con la dificultad de mantenerse fiel a una sola mujer. A la protagonista de "El diario de Bridget Jones" no le hicieron gracia las fotos de su novio con dos bailarinas en un club de "Strip-tease" en Los Angeles, e hizo sus maletas, abandonando la mansión de Clooney. Amigos de la pareja apuntaron a que no es descartable una reconciliación, pero que Renée no lleva bien la afición de George por las fiestas y su estrecha amistad con Julia Roberts.

- El pasado fin de semana quedó oficialmente inaugurado en el Hollywood Boulevard el Teatro Kodak, que será la sede permanente de la ceremonia de entrega de los Oscars a partir del año próximo. El edificio, flanqueado por elefantes de piedra que reproducen los que utilizó Griffith en "Intolerancia", forma parte de un complejo que incluye centro comercial, restaurantes y salas cinematográficas, con un presupuesto superior a los 500 millones (de los cuales menos de la quinta parte fueron para el propio teatro). Algunas voces se han alzado con las primeras críticas, ya que el Kodak "sólo" cuenta con 3.500 butacas, bastante menos que otras sedes anteriores, como el Shrine Auditorium o el Dorothy Chandler Pavillion.