Por Eduardo Larrocha    

Después de realizar varios cortos, "Tailor/ Raftis" es el primer largometraje dirigido por Sonia Liza Kenterman, cineasta de padre alemán y madre griega que ha sabido fundir en su percepción y expresión en imágenes esas dos maneras de entender la realidad contemporánea. La directora también ha escrito el guion.


En su lucha por salir adelante, el personaje de Nikos, el sastre al que da vida Dimitris Imellos, despierta la simpatía del espectador. La vida y el trabajo han cambiado tanto, que no tiene más opción que evolucionar y alterar sus costumbres. El protagonista, junto a Thanasis Papageorgiou, quien interpreta a su padre, ejerce como sastre a la vieja usanza en una céntrica calle de Atenas. El banco amenaza de embargo a estos dos marginados.

Ayudado por Olga, su vecina (Tamilla Koulieva), Nikos acepta el reto y se niega a ser un perdedor, mientras Thanasis se resiste a cambiar las esencias de su trabajo artesanal. Entre telas, patrones y tijeras, Nikos se inventa un nuevo oficio, el de costurero ambulante, menos digno al entender de su padre. Con sus nuevos hábitos, le vemos recorrer en un carromato lejanos barrios de las afueras de la capital helénica. Se echa de menos no contemplar la Acrópolis o la Plaza Sintagma, los lugares emblemáticos de Atenas. La película ofrece una visión nada turística de la ciudad.

Sin amargura, pero llena de verdad, transita entre la alegoría y la caricatura del mundo actual. "Tailor" refleja una realidad griega y europea, tan común como la vida de la gente que a duras penas alcanza para pagar deudas, alimentarse y cobijarse en su hogar. Dimitris Imellos construye a Nikos con una personalidad solitaria y excéntrica, que en algo recuerda al Mr. Hulot de Jacques Tati. Es un ser marginal y obsesivamente pulcro. Resulta anacrónico, vistiendo su impecable traje cuando pasea por los distritos comerciales de Atenas.

"Tailor" se ha distribuido, con el relativo éxito de las obras mínimas, por cines de diferentes países en Europa, Asia y América. Esta coproducción griega, belga y alemana obtuvo el reconocimiento FIPRESCI en el Festival de Tesalónica; Sonia Liza Kenterman recibió el galardón a la mejor directora en el Bergamo Film Meeting, además de ganar los premios de mejor actor para el protagonista, al guion y para la banda sonora de Nikos Kypourgos en la última Mostra de València. Un trabajo maduro, agradable de ver para amantes de un cine de bajo presupuesto, sin pretensiones y lleno de sensibilidad. "Tailor" es una comedia amable y triste, llena de luz mediterránea y de nostalgia por unos tiempos pasados que ya no volverán.


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