Crítica: "La guerra del mañana / The Tomorrow War", paquete lujoso para pobre y nada original contenido
- por © NOTICINE.com
Por Jon Apaolaza
Ante películas como "La guerra del mañana / The Tomorrow War" (2021) surge la pregunta de si los guiones se rigen ya por algoritmos introduciendo múltiples datos sobre gustos, tendencias, cambios de mentalidad, títulos significativos del mismo género, alguna obra clásica, etc, etc..., pero el resultado, por lo contradictorio, acaba sin convencer a la mayoría.
El popurrí que protagonizan Chris Pratt, Yvonne Strahovski y J.K. Simmons a lo largo de más de dos horas, se ha estrenado la semana pasada en la plataforma Amazon, que se lo compró a Paramount ante la falta de salas el año pasado. "La guerra del mañana / The Tomorrow War" parte de la llegada al presente de un grupo de militares del futuro que solicitan la ayuda de los gobiernos y habitantes del planeta para combatir una invasión alienígena de insectos carnívoros gigantes que amenaza con exterminar al género humano.
Con elementos de "Alien", "La guerra de los mundos", "Starship Troopers", "Terminator" y algunas más, la cinta que dirigió Chris McKay y escribió Zach Dean ("La huida / Caída Mortal / Atrapados / Deadfall") resulta entretenida y sin ser -tampoco en esto- originales, sus efectos especiales cumplen dignamente con la tarea de hacer creibles a los bichos alienígenas. Pese a los esfuerzos del guión por aportar entre sus incontables ingredientes unas briznas de profundidad dramática a los personajes, lo que prevalece en "La guerra del mañana / The Tomorrow War" es un empaquetado elegante para un simple videojuego pasivo de matar monstruitos difíciles de exterminar.
Siguiendo con el simil gastronómico, el exceso de ingredientes -algunos de los cuales son tan opuestos como la inclusión racial y el anarco-fascismo- acaba por marear al espectador. Chirría, justo después del buen sabor de boca que deja la cantidad y variedad de los personajes interpretados por afroamericanos, el mensaje trumpista anti-político, y alguien se preguntará si no estaría bien que nos explicaran cómo esos hombres del futuro inventaron el viaje en el tiempo y cómo en lugar de reclutar a millones de personas para ser liquidados por los bichos no mandan un comando que busque a los invasores antes de que ejecuten su exterminio del género humano, lo que acaba haciendo el protagonista de motu proprio. Pero eso sería pedir peras al olmo de la coherencia, especie que no forma parte de este jardín, por el que se pasean con estoicismo los actores.
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Ante películas como "La guerra del mañana / The Tomorrow War" (2021) surge la pregunta de si los guiones se rigen ya por algoritmos introduciendo múltiples datos sobre gustos, tendencias, cambios de mentalidad, títulos significativos del mismo género, alguna obra clásica, etc, etc..., pero el resultado, por lo contradictorio, acaba sin convencer a la mayoría.
El popurrí que protagonizan Chris Pratt, Yvonne Strahovski y J.K. Simmons a lo largo de más de dos horas, se ha estrenado la semana pasada en la plataforma Amazon, que se lo compró a Paramount ante la falta de salas el año pasado. "La guerra del mañana / The Tomorrow War" parte de la llegada al presente de un grupo de militares del futuro que solicitan la ayuda de los gobiernos y habitantes del planeta para combatir una invasión alienígena de insectos carnívoros gigantes que amenaza con exterminar al género humano.
Con elementos de "Alien", "La guerra de los mundos", "Starship Troopers", "Terminator" y algunas más, la cinta que dirigió Chris McKay y escribió Zach Dean ("La huida / Caída Mortal / Atrapados / Deadfall") resulta entretenida y sin ser -tampoco en esto- originales, sus efectos especiales cumplen dignamente con la tarea de hacer creibles a los bichos alienígenas. Pese a los esfuerzos del guión por aportar entre sus incontables ingredientes unas briznas de profundidad dramática a los personajes, lo que prevalece en "La guerra del mañana / The Tomorrow War" es un empaquetado elegante para un simple videojuego pasivo de matar monstruitos difíciles de exterminar.
Siguiendo con el simil gastronómico, el exceso de ingredientes -algunos de los cuales son tan opuestos como la inclusión racial y el anarco-fascismo- acaba por marear al espectador. Chirría, justo después del buen sabor de boca que deja la cantidad y variedad de los personajes interpretados por afroamericanos, el mensaje trumpista anti-político, y alguien se preguntará si no estaría bien que nos explicaran cómo esos hombres del futuro inventaron el viaje en el tiempo y cómo en lugar de reclutar a millones de personas para ser liquidados por los bichos no mandan un comando que busque a los invasores antes de que ejecuten su exterminio del género humano, lo que acaba haciendo el protagonista de motu proprio. Pero eso sería pedir peras al olmo de la coherencia, especie que no forma parte de este jardín, por el que se pasean con estoicismo los actores.
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