La cancelación del Comic-Con, uno de los eventos más importante del mundo sobre la cultura pop, pone en duda la celebración de otros eventos y estrenos previstos para este verano, destacan los medios industriales de Hollywood.

Por primera vez en toda su historia, el multitudinario evento del Comic-Con de San Diego que llega a congregar a más de 130 000 participantes y estaba previsto del 23 al 26 de julio, no se celebrará en su planificación original para este verano y retrasará su edición hasta julio de 2021, según han informado sus organizadores. "Momentos extraordinarios exigen medidas extraordinarias y, aunque estamos tristes por tomar esta decisión, sabemos que es la correcta", ha declarado David Glanzer, portavoz del evento.

Esta convención de fans y presentaciones de futuros estrenos es otra de los muchos eventos con los que está arrasando el coronavirus en todos los ámbitos, pero, especialmente, en el sector audiovisual. Muchas películas, rodajes, festivales y estrenos ya sienten las consecuencias de esta pandemia y se han visto afectados ya sea con su cancelación o su aplazamiento. A pesar de que muchos eventos están cambiando su forma de realizarse como es el caso de festivales, muchos de ellos han realizado un cambio de en formato habitual y se han adaptado a las circunstancias de manera online, la industria hollywoodiense teme que su temporada estival de estrenos se vea también afectada y pierdan millones de dólares ya que, la temporada más rentable de esta industria, es entre mayo y agosto, la cual genera casi el 40% de sus ingresos anuales, siendo la época en que Hollywood presenta sus mejores producciones.

La productora Sony ya ha anunciado el aplazamiento de la mayoría de sus estrenos como "Morbius" o "Ghostbusters: Afterlife" y ahora han sido Disney, Warner Bros y Universal, los que seguirán sus pasos y postergarán los estrenos de sus producciones. Analistas y ejecutivos señalan que, aunque todo vuelva a la normalidad y se acabe el confinamiento, es posible que la gente no vuelva inmediatamente a estos espacios por miedo y precaución y aunque existen otros modelos de negocio como obviar las salas y adelantar los estrenos en plataformas digitales, para muchas productoras no es una buena opción, ya que hay películas de muy alto presupuesto que requieren de una distribución y una publicidad muy exhaustiva para alcanzar el objetivo de ganancias y esto solo se consigue, mayormente, mediante la taquilla, algo que descarta la posibilidad de estreno en plataformas digitales y lleva a la industria a esperar, por el momento, a que todo vuelva a la normalidad.

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