El cineasta neoyorquino Woody Allen, responsable de películas como "Annie Hall" o "Manhattan", ha demandado a la compañía Amazon Studios, exigiendo 68 millones de dólares por incumplimiento de contrato. La productora firmó en 2014 un acuerdo con el director para financiar una serie de televisión ("Crisis in Six Scenes", emitida en Amazon Prime) que se amplió para la producción de cinco películas. Tras la filmación de "A Rainy Day in New York" (terminada en 2017), Amazon se negó a realizar los pagos garantizados de la película, debido a las acusaciones de abuso sexual que resurgieron en torno a Allen en 2016 y a las polémicas levantadas por el movimiento #MeeToo. En junio de 2018, Amazon hizo saber a Allen que no iba a distribuir o explotar las imágenes del film "en ningún territorio nacional o internacional".

La demanda presentada por el cineasta alega: "Amazon ha tratado de excusar su acción haciendo referencia a una acusación sin fundamento de hace 25 años contra el Sr. Allen que era bien conocida por Amazon (y el público) antes de que se firmaran cuatro acuerdos separados con el Sr. Allen. En cualquier caso, no proporciona una base para que Amazon rescinda el contrato".
 
La carrera de Allen se vio dañada por una columna escrita por Ronan Farrow (su hijastro) en The Hollywood Reporter en 2016, donde defendía que su hermana pequeña Farrow había sido abusada por el director. Cuando Amazon firmó el primer acuerdo con Allen (2014), el entonces jefe del estudio de la compañía, Roy Price, declaro que Amazon sería el "hogar" de Allen durante el resto de su carrera. Sin embargo, Price tuvo que renunciar a Amazon después de ser acusado por acoso sexual por uno de los productores de la cadena. La queja impuesta por el neoyorquino señala que, tras el escándalo de Price (diciembre de 2017), la compañía vio dañada su reputación debido también a la asociación que mantenía con Harvey Weinstein y The Weinstein Company. Fue entonces cuando, según el documento, los responsables de Amazon confirmaron que lanzarían "A Rainy Day in New York" de acuerdo al contrato, pero solicitaron que Allen aceptara posponer el estreno de la película hasta 2019.

Pese a que el cineasta cuestiona las bases contractuales para la rescisión del acuerdo, admite que Amazon le informó de que éste se había vuelto "impracticable", debido a las denuncias contra Allen, a sus comentarios controvertidos respecto al #MeeToo y al "creciente rechazo de los mejores talentos para trabajar o asociarse con él". Tras el resurgir de la polémica en torno a los supuestos abusos, muchos de los actores y actrices que habían trabajado con él lamentaron haberlo hecho e incluso donaron sus salarios a organizaciones benéficas destinadas a defender a víctimas de abusos. Entre ellos se encuentran Rebecca Hall ("Vicky Cristina Barcelona'") y Timothée Chalamet ("Call Me By Your Name"), quienes forman parte del reparto de "A Rainy Day in New York" y anunciaron que donarían el dinero que ingresaron por la película. En sentido opuesto también se manifestaron otros, como el español Javier Bardem, quien en .

Amazon podría establecer una defensa en torno a la "frustración de propósito", una doctrina legal sobre eventos imprevistos que socavan el principal propósito de una parte para celebrar un contrato. Otras fuentes señalan que los problemas de financiación de las cintas de Allen eran previos al #Metoo, ya que "sus películas no hacen dinero" y durante años el director ha estado pasando de un patrocinador a otro.

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